¿Cómo pronosticar las olas gigantes?
Científicos de la Universidad de Hamburgo desarrollaron una teoría sobre la formación de estas gigantes olas para diseñar pronósticos que podrían hacer la navegación más segura. Los científicos pueden generar olas con la ayuda de un túnel de viento. Las “olas monstruo” se diferencian de los tsunamis porque, por lo general, no recorren grandes distancias hasta desaparecer en las playas.
“Estamos en el puente de mando del gran crucero “Sea Princess”. Una tormenta azota el mar y golpea la eslora a todo su largo. De pronto, se levanta una inmensa ola justo frente a la proa. El barco sube a la cresta de la ola y cae en el valle que deja”.
La tripulación se lleva un gran susto pero logra evitar el naufragio. Otros barcos tienen menos suerte, como lo cuenta Norbert Hoffmann, profesor de la Universidad Técnica de Hamburgo: "Hay numerosos casos de accidentes graves causados por estas olas intempestivas“.
Un fenómeno que también afecta las plataformas de extracción de gas y petróleo en el Mar del Norte, frente a las costas de Inglaterra y Noruega.
Con la ayuda de la matemática lineal el profesor Hoffmann ha desarrollado una fórmula que tiene en cuenta la influencia que ejercen las olas entre sí. Cuando una corriente marina es tocada por un viento fuerte, la ola generada le roba la energía a las olas vecinas.
"El robo de energía por parte de la ola mayor concentra la potencia y el tamaño en una ola central que se desvanece tan rápido como se genera, dejando luego aguas totalmente tranquilas”.
El túnel de viento en el que se generan olas artificiales es operado desde un computador por el ingeniero Amin Chabchoub: "El canal de olas asemeja una bañera de 15 metros de largo en la que en una de sus puntas hay instalada una esclusa que crea la ola con la ayuda de un cilindro hidráulico. En la otra punta vemos una playa que absorbe la energía.”
La ola generada en el túnel de viento empieza a crecer centímetro a centímetro hasta alcanzar medio metro de longitud, para luego desintegrarse. Estas olas artificiales reúnen los criterios para convertirse en “olas monstruo” robándole la energía a las demás olas, como los científicos presumen que sucede en la naturaleza. El profesor Hoffmann: “Los resultados obtenidos en laboratorio los hemos traducido en dimensiones de olas marinas que alcanzan una amplitud de hasta 30 metros. Los experimentos son sorprendentemente cercanos a la realidad en los mares.”
Un trabajo que un día hará posible realizar pronósticos que adviertan la posibilidad de encontrarse con “olas monstruo” y así, evadir a tiempo el peligro en los mares cada vez más poblados por mega-cargueros y cruceros con miles de personas a bordo.