Descubriendo el mundo a través del paladar
Philipp Boecker, fundador de Sapio, explica que los viajes culinarios que organiza su agencia también son viajes culturales: “Para los antiguos romanos la palabra ‘cultura’ significaba agricultura, es decir, la tierra cultivada en comparación con el páramo o la naturaleza silvestre. De ahí viene la palabra cultura, y así es también como nosotros la interpretamos. Una región se puede descubrir con el sentido del gusto. Además, podemos entender su historia a través de su tierra, viendo qué es lo que crece allí y cómo los humanos la han trabajado”.
También el nombre de la agencia de viajes proviene del latín. “Sapio” quiere decir “yo saboreo”, “yo sé”, “yo tengo sabor”. Uno de los 17 destinos de viaje en Italia es la región de Piamonte. Boecker revela que este viaje culinario también es uno de sus favoritos: “En las noches salimos a buscar trufas con Gianni y su perra Lila. Desde las once de la noche hasta las dos de la mañana recorremos el bosque en busca de trufas. Y la madre de Gianni, María, cocina para nosotros en su casa”.
Experiencias exclusivas
Según el fundador de Sapio, estos viajes culinarios les abren a los viajeros las puertas de las casas de personas que, de otra manera, no llegarían a conocer. Ya sea vivir por un día con una familia de buscadores de trufas o pasar un día con pescadores en la laguna de Venecia, Boecker cuenta que su agencia ofrece muchas de estas experiencias exclusivas.
Aparte de las excursiones a Italia y Francia, desde el 2012, también se pueden visitar cuatro destinos en Alemania: Berlín, Múnich, el Jura de Suabia y la región de Nahe. “Alemania es un interesante destino culinario. Sobre todo el año pasado hubo un fuerte desarrollo y cada vez más personas, también del extranjero, se interesan por las tradiciones culinarias del país”, cuenta Boecker.
Enseguida añade que por razones históricas estas tradiciones no se exhiben tanto como en otros países. Asimismo, están poco documentadas. Sin embargo, cada vez hay mayor conciencia sobre el tesoro culinario que guardan las tierras germanas, asegura.
Turismo sostenible
La agencia de viajes trabaja de acuerdo a los principios del turismo sostenible. En el ámbito ecológico, promueve viajes en tren y en grupo, así como viajes cercanos. Para trasladarse dentro de Alemania, los empleados de Sapio prescinden de tomar un avión.
Philipp Boecker explica que la agencia, además, solo coopera con pequeñas empresas familiares: “Si viajo con una aerolínea internacional y me hospedo en el hotel de una cadena hotelera internacional, entonces quizá solo un tres por ciento del precio del viaje se queda en la región que visito. En nuestro caso, en cambio, las familias, con las que cooperamos, obtienen un 65 por ciento del precio”.
Asimismo, la agencia alemana procura promover las tradiciones locales y fortalecer la identidad regional en los destinos de viaje.
Por cortesía de Sapio, a continuación compartimos con ustedes una receta de Jörg Geiger, productor de vino espumoso a base de peras en el Jura de Suabia, uno de los destinos culinarios de la agencia. Los invitamos a preparar sopa de lentejas con peras y pato crujiente.
Ingredientes
Para la sopa de lentejas:
200 gramos de lentejas
20 gramos de mantequilla clarificada
100 gramos de cebolla en cubos
2 cucharadas pequeñas de concentrado de tomate
2 hojas de laurel
2 enebrinas machacadas
pimienta
2 cucharadas grandes de vinagre de pera
1 cucharada grande de azúcar
Para el pato crujiente:
1 pechuga de pato
2 hojas de masa brik
50 gramos de mascarpone
4 centilitros de jarabe de pera
5 centilitros de vino espumoso a base de pera
4 yemas de huevo
20 gramos de pan rallado
sal
pimienta de Java o cubeba
curry
jengibre
cilantro molido
chile molido
Preparación
Sopa de lentejas:
Remojar las lentejas en un litro de agua. Rehogar la cebolla y el concentrado de tomate en mantequilla. Añadir las lentejas junto con el agua. Agregar los demás ingredientes y dejar cocer a fuego lento. Guardar una parte de las lentejas en un recipiente para la guarnición. Triturar el resto con la batidora.
Para la guarnición, sazonar las lentejas con vinagre balsámico, aceite de avellana, sal y pimienta. Decorar con hojas de acedera romana y pétalos de capuchina.
Pato crujiente:
Asar la pechuga de pato y sazonar con sal. Enfriarla. Después cocerla al vació y a una temperatura de 70 grados centígrados. Extender las hojas de masa brik y dividirlas en cuatro partes. Mezclar los demás ingredientes hasta obtener una masa lisa. Verter en una manga pastelera y dejar enfriar. Con la manga pastelera cubrir las hojas de brik con la masa lisa. Cortar la pechuga de pato en ocho trozos del mismo tamaño y colocarlos sobre la masa. Untar la carne con el mascarpone y envolverla con la masa brik. Freir los trozos hasta que estén dorados y cortarlos en diagonal.
Guten Appetit!