Adeptos de Park se enfrentan a Policía y periodistas
13 de marzo de 2017Una docena de simpatizantes de Park Geun-hye, que este domingo (12.03.2017) abandonó el complejo presidencial para mudarse a su residencia privada en el sur de Seúl, montaron guardia toda la noche junto a la casa de la exmandataria coreando su nombre, agitando banderas surcoreanas e insultando a los periodistas allí presentes.
A primera hora del día, estos seguidores trataron de impedir a la fuerza que varios fotógrafos y operadores de cámara tomarán imágenes del interior de la parcela de la casa de la expresidenta, situada en el exclusivo distrito de Gangnam. Esto obligó a intervenir a la policía para evitar que los partidarios de la depuesta jefa de Estado agredieran a miembros de los medios de comunicación.
A las 15.30 hora local (6.30 GMT) el número de periodistas y partidarios de Park se había incrementado con creces, lo que obligó a los agentes a crear barreras para separar a ambos grupos, según las imágenes tomadas en el exterior de la vivienda y difundidas por Yonhap TV.
Choques violentos todo el fin de semana
Los simpatizantes de la expresidenta protagonizaron violentos choques con la policía el sábado y el viernes, cuando el Tribunal Constitucional ratificó la destitución de Park que el Parlamento había aprobado en diciembre por sus conexiones con la trama de la "Rasputina". Tres hombres, todos ellos seguidores de Park, fallecieron como consecuencia de estos encontronazos, que causaron decenas de heridos y al menos cuatro detenidos.
Este mismo grupo agredió también el viernes a periodistas que se habían congregado frente a la principal instancia judicial surcoreana situada en el centro de Seúl. Muchos de los seguidores de Park se declaran nostálgicos de la dictadura de Park Chung-hee (padre de la mandataria depuesta que gobernó de 1961 a 1979) y aseguran que su destitución es un complot de los partidos de izquierda y los medios de comunicación.
Críticas de periodistas y políticos
Los diarios y políticos surcoreanos amanecieron este lunes criticando a la expresidenta por sus desafiantes declaraciones con que se refirió a la justicia de su país al abandonar la residencia presidencial: "Tomará tiempo, pero creo que, eventualmente, la verdad será revelada", comunicó Park, a través de un portavoz, sin aceptar el veredicto. "¿Está Park tratado de dividir al país?, coincidían en preguntar editorialistas y políticos.
El Constitucional consideró el viernes que la expresidenta vulneró la Carta Magna al permitir a su amiga Choi Soon-sil, conocida como la "Rasputina", inmiscuirse en asuntos de Estado sin ostentar cargo público y al confabularse con ella para extorsionar fondos a grandes empresas. Con su cese, Park, a la que la fiscalía considera sospechosa en la trama de corrupción, queda despojada de su inmunidad y Corea del Sur está obligada a celebrar elecciones presidenciales en menos de 60 días.
Ejercicios militares y otras tensiones
Al mismo tiempo, los ejércitos de Corea del Sur y EE.UU. comenzaron este lunes sus maniobras anuales de combate simulado Key Resolve, en un momento de especial tensión en la península tras los últimos ensayos armamentísticos del Norte y el inicio del despliegue del escudo THAAD.
El ejercicio se llevará a cabo hasta el próximo 24 de marzo y, como viene siendo habitual en los últimos años, coincide con la celebración en Corea del Sur de las maniobras conjuntas Foal Eagle, que arrancaron el pasado 1 de marzo y durarán hasta finales de abril.
A esto se suma la instalación en suelo surcoreano del THAAD, un sistema para derribar proyectiles norcoreanos que amenacen con caer sobre el vecino del sur, que comenzó la pasada semana y que además de despertar el rechazo del régimen de Kim Jong-un también ha desatado fuertes críticas de China.
Pyongyang, que considera todas estas maniobras como un ensayo para invadir su territorio, lanzó además el 6 de marzo cuatro misiles balísticos de medio alcance que cayeron en aguas japonesas, redoblando la tensión regional. Y a este clima de tirantez e incertidumbre que acompaña la crisis política en Corea del Sur, se suma el asesinato en Malasia del hermano del líder norcoreano, del que Seúl acusa abiertamente a Pyongyang, que niega toda participación.
RML (efe, afp)