¿Adiós, East Side Gallery?
27 de marzo de 2013El 9 de noviembre 1989, la apertura de la frontera entre las dos Alemanias desató tal euforia entre los ciudadanos a uno y otro lado del Muro de Berlín que, de haberlo querido, nadie habría podido detener a los exaltados que intentaban derribarlo. La barrera en cuestión había dividido a unos compatriotas de otros durante décadas; de ahí que, en aquel momento, el deseo de las masas fuera verla destruida. ¿Quién podía imaginar entonces que los lugareños terminarían tomándole tanto cariño a lo poco que quedó de esa muralla?
Este miércoles (27.3.2013), 250 agentes policiales fueron apostados en las cercanías de la East Side Gallery, un tramo del Muro de Berlín adornado con pinturas de artistas de todo el mundo, para evitar que manifestantes interfirieran con el desmantelamiento parcial de ese monumento. El segmento de la construcción que sigue en pie no es percibido únicamente como un imán para los turistas, sino también como patrimonio cultural de todos los alemanes. Cerca de 6.000 personas paralizaron los trabajos de demolición a principios de marzo.
La empresa Living Bauhaus comenzó a retirar segmentos de la East Side Gallery el 28 de febrero para poder erigir un edificio con viviendas de lujo entre el Muro de Berlín y el río Spree, en la antigua “Franja de la Muerte”. Los vecinos del entorno no lo esperaban, pero no tardaron en protestar contra este proyecto. El gerente de la compañía, Maik Uwe Hinkel, asegura que no es sólo la construcción del complejo residencial la causa de la demolición de parte del muro; la controvertida moción ha sido atribuida también al Gobierno comunal.
Confusión y frustración
El alcalde del distrito berlinés de Friedrichshain-Kreuzberg, el político verde Franz Schulz, dijo a la agencia de noticias dpa que la remoción de la East Side Gallery era necesaria para ampliar un puente peatonal sobre el Spree. Con el paso del tiempo, la situación se ha vuelto más confusa y la adjudicación de responsabilidades, más difícil. El Senado de Berlín ha criticado abiertamente la continuación de las labores de demolición; pero los conductores de las grúas y sus jefes tienen permiso para seguir adelante con las obras.
Para apaciguar a los defensores de la East Side Gallery, conocida como “la galería de arte al aire libre más larga del mundo”, Living Bauhaus ha anunciado que los módulos de hormigón retirados hasta ahora volverán a ser colocados en su lugar posteriormente. Cuatro fragmentos de 1,2 metros de ancho fueron removidos este 27 de marzo; evidencia de que los inversionistas inmobiliarios, el Senado de Berlín y la alcaldía de Friedrichshain-Kreuzberg no pudieron llegar a un acuerdo para dejar intacto este emblema de la capital alemana.
Hasta 1989, sólo la cara occidental del Muro de Berlín estaba pintada. Después del 9 de noviembre de ese año, 1.316 metros de la cara oriental fueron decorados con 103 obras que terminaron convirtiéndose en elementos fundamentales del paisaje berlinés. “Me parece increíble que la East Side Gallery sea demolida de un modo tan brutal, así, sin más ni más”, lamentaba hace poco el pintor Thierry Noir, autor de algunas de las pinturas más representativas de esta “galería al aire libre”.
Autor: Evan Romero-Castillo
Editora: Emilia Rojas Sasse