Alcalde de Hamburgo, bajo presión por caos del G20
12 de julio de 2017La cumbre del G20 no iba a molestar a los ciudadanos más que la fiesta anual del cumpleaños del puerto, dijo el alcalde de Hamburgo, Olaf Scholz, antes des la reunión. Dijo que la seguridad de los participantes, los observadores y los residentes estaba garantizada. Esto fue antes de las primeras manifestaciones y los primeros disturbios. Ahora pide perdón por todo lo ocurrido y también por las cosas que dijo anteriormente. "Me avergüenzo de lo sucedido", dijo en entrevista con el semanario Stern y pidió disculpas en una declaración oficial ante las cámaras de la ciudad-estado.
"Pido disculpas a los ciudadanos de Hamburgo por no haber sido capaz de garantizar el orden público", declaró Scholz, quien dijo que en retrospectiva, quedó claro que los esfuerzos de seguridad no fueron suficientes para manejar una nueva dimensión de la violencia.
Un tono inusual
Son palabras inusuales para Olaf Scholz. El político socialdemócrata tiene fama de ser pragmático y algo aburrido. El carisma nunca fue su fuerte. Sin embargo, se lo conocía como alguien capaz de organizar eventos exitosamente.
Esa habilidad le consiguió muchos puestos en el partido socialdemócrata. De 1998 a 2001 y 2002 a 2011 fue miembro del Parlamento federal, el Bundestag. Durante ese tiempo fue secretario general de su partido y ministro de Trabajo y Asuntos Sociales. Desde 2011 es alcalde Hamburgo.
Posible candidato a la cancillería
Dentro de su partido Scholz fue incluso un posible candidato a la cancillería. Pero el SPD se decidió finalmente por Martin Schulz. Ahora, los disturbios en la cumbre del G20 han dañado enormemente la imagen de Olaf Scholz. Los críticos comparan el papel de Scholz en referencia a la cumbre con la del ministro del Interior de Hamburgo durante la gran inundación en 1962. Ese ministro del Interior era el joven Helmut Schmidt. Por su valiente intervención en la crisis de ese año, Schmidt se calificó para puestos más altos y en 1974 fue canciller de Alemania. En cambio, luego de la crisis del G20, Scholz no salió tan bien parado.
La mala impresión se extiende a todo el Partido Socialdemócrata. La cumbre G20 fue un tema muy controvertido dentro del SPD. Antes de la cumbre, tanto el candidato a canciller, Martin Schulz, como el ministro de Exteriores, Sigmar Gabriel, dijeron que ese tipo de reuniones deberían tener lugar exclusivamente en el marco de las Naciones Unidas. El también socialdemócrata Scholz, quien como alcalde es responsable de cuidar el atractivo turístico de Hamburgo, no se mostró muy contento con esas declaraciones. El apoyo a Schulz provino, irónicamente, de Angela Merkel y miembros del partido conservador CDU.
En resumen: nadie se puede permitir echarle la culpa de todo al partido adversario. Todos querían esta cumbre y todos participaron en su preparación. El daño es un poco mayor para el SPD, sin embargo. No sólo por el hecho de que el alcalde de Hamburgo pertenezca al SPD, sino también porque en cuanto al tema de la seguridad los ciudadanos tradicionalmente no suelen tener mucha confianza en el Partido Socialdemócrata.
Autor: Konstantin Klein (GG/ CP)