Alemania: industria automovilística bajo presión
14 de abril de 2023"No trasladaremos la producción actual a Estados Unidos, pero es probable que construyamos las próximas plantas en Estados Unidos. Existe el peligro de que Europa sea la perdedora en esta redistribución". Esta declaración de Klaus Rosenfeld, máximo responsable de Schaeffler, cuarto proveedor alemán de la industria automovilística, refleja una tendencia importante: la industria automovilística desplaza cada vez más su producción de Alemania y Europa a China y Norteamérica.
"Las razones de la migración de la industria automovilística de Alemania y Europa son complejas", explica a DW Stefan Schneeberger, director de proyectos de Berylls Strategy Advisors, una consultora especializada en la industria del automóvil. Uno de los factores clave es el elevado costo de la energía. Los precios de la electricidad en la Unión Europea son entre dos y tres veces superiores a los de Estados Unidos. "Los mayores requisitos normativos a los que se enfrenta la industria en Europa también hablan a favor de la relocalización. Y, por supuesto, las subvenciones más atractivas que se ofrecen actualmente en EE.UU. son un aliciente". Sin embargo, estas subvenciones multimillonarias están vinculadas a tecnologías respetuosas con el clima, como la electromovilidad.
Cien mil empleos menos en Alemania
Como consecuencia de los planes de reubicación, las previsiones de producción para el periodo de 2023-2029 en Europa caen significativamente, según un reciente análisis de Berylls. Pero en otras partes del mundo crecen tanto que se espera un aumento en la producción mundial de vehículos, aunque a un ritmo más lento que el previsto en 2021.
Según el análisis, en los próximos años habrá una diferencia de producción de unos cuatro millones de vehículos entre Alemania y Norteamérica. Traslados, como los anunciados recientemente por Audi y Ford, reforzarían esta tendencia. Por tanto, se prevén pérdidas de hasta 100.000 puestos de trabajo y un descenso del producto interno bruto (PIB) de Alemania de 0,6 puntos porcentuales en 2029.
Estados Unidos también pasará a la electricidad
Junto con la digitalización, la expansión de los sistemas de propulsión alternativos es una de las mega tendencias de la industria automovilística. En Estados Unidos, el fin del motor de combustión interna está tardando más en llegar que en Europa o China. A modo de comparación: actualmente, un 14% de las nuevas matriculaciones en Alemania son vehículos puramente eléctricos; en China, el mayor mercado de coches eléctricos, la cifra es del 21%, mientras que en EE.UU. no alcanza al 6%.
Esta situación podría cambiar radicalmente en un futuro próximo. "Los tiempos en que los vehículos eléctricos eran un fenómeno limitado a la costa oeste de EE.UU. han pasado", afirma a DW Henning Ludes, experto en el mercado automovilístico estadounidense y socio de Berylls Strategy Advisors.
Según Ludes, EE.UU. ya compite directamente con Europa por el segundo puesto como mercado más importante del mundo en coches eléctricos, por detrás de China. Se espera que las ventas de este tipo de vehículos superen los seis millones de unidades anuales dentro de Estados Unidos en 2030. Si a eso se suman "los recientes anuncios del Departamento de Energía de EE.UU. para endurecer las normas de ahorro de combustible y el anuncio de la Agencia de Protección Medioambiental de EE.UU. (EPA) para limitar las emisiones de CO2, se podría catapultar la cuota de mercado de los coches eléctricos en ese país aún más, llegando al 60% en 2030", afirma Ludes.
(mnl/ers)