Alemania recuerda a las víctimas de la masacre de Winnenden
21 de marzo de 2009Alemania vive hoy una jornada de luto nacional en memoria de las víctimas del ataque ocurrido el pasado 11 de marzo en la escuela Albertville de Winnenden. Las banderas ondean a media asta en todo el país y decenas de miles de personas participaron en la conmemoración principal, que se llevó a cabo en la mencionada localidad, ubicada a unos 24 kilómetros de Stuttgart.
Mayor control de armas
Uno de los oradores principales en la ceremonia conmemorativa de las víctimas fue el presidente alemán, Horst Köhler. Éste abogó por un control más estricto sobre los medios que se caractericen por un contenido violento, incluidos los juegos por computadora.
No puede ser positivo el consumo permanente de videojuegos en los que se presente la destrucción de cuerpos humanos, dijo el mandatario germano.
Köhler advirtió que acontecimientos como los de Winnenden constituyen un reto que no es exclusivo para el Estado, ni éste debe enarbolar la prohibición como única solución. Amigos y familiares deben participar en la atención a los contenidos que consumen los niños, indicó el presidente alemán. “La prevención implica también decir no a cosas que uno considera malas, aunque no estén prohibidas”, dijo.
Ataques como el de Winnenden o los ocurridos anteriormente en las ciudades alemanas de Erfurt y Emsdetten “ponen de nuevo ante nuestros ojos la fragilidad de la vida humana, y nuestra engañosa percepción de normalidad y seguridad”, agregó el presidente alemán.
Hablan los padres de las víctimas
En la ceremonia participó también la canciller Angela Merkel, quien no pronunció discurso alguno. Además, estuvieron presentes el vicecanciller alemán y ministro de Relaciones Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, así como los dirigentes de las fracciones políticas representadas en el Bundestag. En total asistieron 900 personas a la ceremonia celebrada en la iglesia católica St. Karl Borromäus, a la cual siguió el acto oficial.
Miles de ciudadanos de Winnenden presenciaron la ceremonia en un estadio deportivo ubicado junto a la escuela Albertville. En el acto fueron pronunciados en voz alta los nombres de las víctimas del ataque.
Los padres de cinco de las víctimas se pronunciaron por un control más estricto de armas en Alemania y de los contenidos para jóvenes en Internet, así como la prohibición de los juegos para computadora en los cuales predomine la violencia.
“Queremos que se limite el acceso de armas a la juventud”, dijeron en una carta abierta publicada en el periódico Winnender Zeitung.
También denunciaron hechos como que “la normatividad actual permite el entrenamiento en uso de armas a partir de los 14 años de edad.”
Además, “las penas contempladas contra quienes actúen contra estas leyes no cumplen su objetivo”. “Si permitimos que nuestros conciudadanos reciban todos los días una dosis de muerte y violencia a través de los medios, es de esperarse que la realidad siga estos ejemplos de un modo lento, pero constante”, dicen estos padres de familia en otra parte de la misiva.
el/dpa/pk