En su obra Gabriel Vallecillo conjuga lo ancestral con los nuevos mundos tecnológicos. De esta manera acerca, por ejemplo, el legado de la cultura lenca al público en Berlín. "Es fascinante tener la oportunidad de crear en una ciudad que te está abrazando y dando la bienvenida”. Uno de los propósitos del artista hondureño afincado en la capital alemana es iniciar una suerte de diálogo con quienes pasan por casualidad por sitios donde proyecta contenidos audiovisuales. Por eso da tanta importancia al espacio público. En Honduras y en América Latina en general "el arte se queda encerrado en pequeños espacios” dice el artista audiovisual refiriéndose a la falta de seguridad en las calles: "No puedes andar con cámaras y proyectores porque es peligroso”. Las instalaciones de una antigua destilería berlinesa, en cambio, son el sitio ideal para recrear un ritual cósmico maya. Y rendir homenaje a la madre tierra, a la cultura lenca y a la activista Berta Cáceres asesinada en su país en 2016.