Arqueólogos abren los dos ataúdes hallados en Notre Dame
15 de diciembre de 2022Los dos ataúdes de plomo descubiertos tras el incendio de la catedral de Notre Dame de París son los de un famoso canónigo y un noble desconocido, anunciaron el pasado viernes (09.12.2022) los científicos que los analizaron.
Estos sarcófagos antropomorfos fueron desenterrados en marzo y mayo por los equipos del Instituto Nacional de Investigaciones Arqueológicas Preventivas (Inrap) durante las excavaciones previas a la reconstrucción de la aguja de la catedral, parcialmente destruida por el incendio de abril de 2019.
A continuación, se confiaron al Instituto Forense de Toulouse, que se encargó de abrirlas y estudiar los huesos de los fallecidos y otros objetos presentes en las fosas.
Situados en el crucero del transepto, en un lugar y a una profundidad diferentes, los dos enterramientos se encontraban en buen estado de conservación.
Primer sarcófago: un noble desconocido
El sarcófago descubierto primero, en marzo, data de "entre el siglo XIV y finales del XVII", según Christophe Besnier, responsable de las excavaciones. Contiene los restos de un hombre embalsamado cuya identidad aún no se ha establecido.
Según Eric Crubéry, antropólogo de la Universidad de Toulouse III que participó en el análisis, el hombre tenía "entre 25 y 40 años", "montaba a caballo desde su juventud" y "presentaba una ligera deformidad craneal" y probablemente tuberculosis, declaró en una rueda de prensa en Toulouse.
Probablemente era un rico notable, porque "sólo el 4 % de la nobleza (...) tenía la posibilidad de ser embalsamada o de tener un ataúd de plomo", dijo.
Segundo sarcófago: un famoso canónigo
En cuanto al segundo sarcófago, se conocía su ubicación y contenía un epitafio, medallas y una placa que mencionaba al canónigo Antoine de La Porte. Este último, fallecido a los 83 años en 1710, fue un prelado cuyo retrato se conserva en el Louvre.
Los enterramientos en catedrales se practicaron durante todo el periodo medieval y moderno. Los lugares más solicitados estaban cerca del coro, donde se enterraba a obispos y arzobispos.
El crucero del transepto era, por tanto, un lugar muy frecuentado por notables y canónigos, recuerda Christophe Besnier. "Más de 300 personas fueron enterradas en Notre Dame" y este tipo de sepultura estaba "reservada a una élite" porque "el plomo era muy caro".
Futuros análisis
Se han tomado 200 muestras de estos restos, que aún deben analizarse en profundidad. Se realizará una prueba de datación por C14 para determinar con mayor precisión la edad del primer fallecido. Los primeros resultados se esperan para el primer semestre de 2023.
Los sarcófagos permanecerán en manos del Inrap otros dos años antes de ser entregados al Ministerio de Cultura, que decidirá su destino.
Los esqueletos podrían entonces volver a enterrarse, como ha ocurrido con otros restos descubiertos durante las excavaciones.
FEW (AFP, The Guardian)