¡Atención cineastas!
7 de octubre de 2004El Festival Internacional de Cine de Berlín y la Fundación Cultural Federal alemana han creado el llamado World Cinema Fund, WCF (Fondo para la Cinematografía Mundial), para promover proyectos de cine provenientes de América Latina, Medio Oriente, Asia y África. Parecido al fondo cercano al Festival de Cannes, Fonds Sud, el World Cinema Fund, que contará con un presupuesto de 500.000 euros, apoyará aquellas regiones en donde los proyectos fracasan por falta de recursos, por obstáculos políticos, religiosos y culturales.
“Ya hemos empezado a revisar proyectos”, dijo visiblemente emocionado, el director del Festival, Dieter Kosslick. Lo que en la Berlinale es una novedad, tienen hace mucho tiempo los festivales de renombre como el de Rotterdam, en Holanda o el de Göteborg, en Suecia. “Entramos en contacto con una serie de películas, incluso cortometrajes de contenido muy político, provenientes de Afganistán y América Latina, y ya que la directora artística de la Fundación Cultural Federal, Hortensia Völckers, es argentina, se interesó por hacer algo más, y fue ella misma quien propuso la creación del fondo”, señala Kosslick.
Ayuda al país productor
El respaldo que ofrece Berlín no deberá superar el 50% del presupuesto total de la cinta y no podrá rebasar el límite de 100,000 euros por proyecto. Los recursos serán destinados al país productor de la cinta, independientemente de donde tenga lugar su estreno, aunque sería bien visto que sea en Alemania. En caso de que la película promovida tenga éxito comercial, en ello también quiere participar la Berlinale. “Precisamente éste tipo de cintas se convierten a veces en éxitos de taquilla mundiales”, señala Kosslick, pero advierte que el respaldo no tiene que ser devuelto, consciente de que tan sólo la ayuda en la producción no resuelve por completo el problema de financiamiento, pues a menudo hay que hacer frente a altos costos de post-producción.
Apoyo a la distribución
Parte de los recursos del World Cinema Fund, serán destinados a la distribución de las cintas. “Hemos constatado que muchos largometrajes que incluso ganan ‘Osos de Oro y de Plata’, en la Berlinale, a veces nunca llegan a verse en los cines”, advierte Kosslick. Cada distribuidor recibirá hasta 15.000 euros por producción que podrán destinarse a las labores de subtitulación, copiado y publicidad de la cinta. “Eso es lo que este tipo de producciones necesitan, algo sumamente importante”, señala Kosslick.
Según la Fundación Cultural Federal, podrán optar a una ayuda productoras con directores latinoamericanos, de África y Cercano y Medio Oriente, además de productores alemanes que colaboren con algún director de dichas regiones. Las ayudas sólo se concederán a empresas con sede en Alemania, por lo que las empresas extranjeras deberán buscar alguna colaboración con un socio germano.
El responsable de uno de los festivales cinematográficos más importantes de Europa espera que hasta el 27 de octubre, fecha límite de postulación de proyectos, muchos cineastas envíen sus propuestas. Las películas no tienen que mostrarse necesariamente en la Berlinale, cuya próxima edición se celebrará del 10 al 20 de febrero, pero si hay interés en que tengan su estreno en algún festival alemán. El Festival de Rotterdam es aún más generoso. Muchas de las películas que ha apoyado, como “Intervención Divina”, de la cineasta palestina Elia Suleiman, fue premiada en Cannes. El mayor festival de cine mundial no tiene un fondo propio para la promoción cinematográfica.