Aumentos salariales de alto nivel en Alemania y Francia
5 de noviembre de 2007
Según informes del semanario Der Spiegel, las fracciones mayoritarias de la cámara baja del Parlamento de Alemania, el Partido Socialdemócrata (SPD) y la Unión Cristianodemócrata (CDU, por sus siglas en alemán respectivamente), han avalado incrementar sus salarios en 9.4%, luego de que permanecieran congelados durante más de cuatro años.
Sin embargo, el aumento se realizará de forma gradual. Con la aprobación de esta propuesta, alcanzada sin mayores obstáculos entre ambos grupos parlamentarios, la dieta mensual de los diputados será de 8.400 euros, suma similar a la que perciben los jueces del Tribunal Supremo alemán.
Ingresos adicionales
Además de este pago, los legisladores del Bundestag reciben cada mes la cantidad de 3.720 euros por concepto de gastos de representación, pero también ingresos extraordinarios para quienes fungen como asesores o abogados en empresas e instituciones privadas, algo que permite la Constitución alemana al considerarlos representantes del pueblo sin más compromisos que el de su “ética personal”.
Hasta antes de julio de 2007, no se les obligaba a rendir cuentas públicas sobre este tipo de ganancias por sus servicios para el sector privado. No obstante, desde esta fecha el Tribunal Constitucional de Alemania decidió que los diputados deben hacerlo “para que el pueblo pueda conocer sus posibles intereses y sus medios económicos”.
Esta decisión respondió a una demanda presentada por nueve miembros del Bundestag, quienes intentaban bloquear una ley propuesta en 2005 por Los Verdes y el SPD, destinada a transparentar el tema y evitar casos de corrupción.
Uno de los más conocidos fue el del ex líder de la CDU Laurenz Meyer, quien recibía anualmente 60.000 euros de la empresa energética RWE, así como descuentos especiales en las facturas por consumo de electricidad y préstamos de dinero a bajas tasas de interés. Ante las presiones y el escándalo, Meyer presentó su renuncia a finales de 2004.
Un sueldo insuficiente
A partir de 2008 el mandatario Nicolás Sarkozy cobrará 19.000 euros mensuales en lugar de 8.300 euros, la misma cantidad que tendrán los diputados alemanes. Así lo aprobó hace unos días la Asamblea Nacional de Francia.
La medida está destinada a equiparar el salario del Presidente con el del Primer Ministro, pero también con sus pares europeos, explicó el líder del grupo parlamentario de la Unión por un Movimento Popular (UMP), Jean-François Copé.
"Es una cuestión de transparencia, pero también de coherencia. Ser presidente de la República, ser jefe de Estado, es una responsabilidad considerable”, dijo Copé. “Me parece totalmente normal que tenga una remuneración comparable a la del jefe de gobierno y la de los jefes de Estado de países europeos”.
La cifra ratificada por los legisladores franceses representa un incremento de 140% al sueldo presidencial, el cual equivaldrá a 240.000 euros brutos anuales. Este hecho ha sido calificado de “indecente” y duramente criticado por los grupos de izquierda, debido a que gran parte de la población gala ni siquiera alcanza los 1.500 euros al mes.
Las ganancias del gobernante galo se acercan a las percepciones económicas del primer ministro británico Gordon Brown, quien obtiene 261.200 euros al año, y de la canciller alemana, Angela Merkel, con 272.400 euros.