Banco Mundial admite manipulación de datos sobre Chile
14 de enero de 2018El economista jefe del Banco Mundial, Paul Romer, reconoció este sábado (13.01.2018) que la entidad cambió de forma "engañosa e injusta” las metodologías de cálculo del informe "Doing Business”, uno de sus principales barómetros, con el objetivo de perjudicar al Gobierno de la socialista Michelle Bachelet entre 2006 y 2010, y favorecer a su sucesor, el derechista Sebastián Piñera.
En entrevista con el periódico The Wall Street Journal, Romer dijo que se afectó la posición de Chile en los ránkings de competitividad empresarial debido a "motivaciones políticas” del Banco Mundial, por lo que ofreció disculpas. "Quiero disculparme personalmente ante Chile y cualquier otro país en el que hayamos transmitido la impresión equivocada", dijo Romer. "No hicimos las cosas lo suficientemente claras", añadió.
Contrariamente a lo que ha dicho la derecha chilena en los últimos años, "las condiciones económicas no empeoraron en Chile bajo la administración de Bachelet”, admitió Romer. El encargado del Banco Mundial agregó que esto motivará cambios en la metodología de cálculo y se recalculará los ránkings de competitividad de los últimos cuatro años, lo que podría afectar también a otros países.
Sospecha de intervención política
En el caso específico de Chile, el ránking global bajó constantemente durante el primer gobierno de Bachelet, mientras que en contraste, durante el mandato de Piñera subió notoriamente. Esto ocurrió no por cambios específicos en el manejo del país, sino por la introducción, aparentemente malintencionada, de cambios en los sistemas de medición con el fin de perjudicar a uno y beneficiar a otro.
La respuesta del Gobierno de Chile no se hizo esperar. El ministro de Economía, Jorge Rodríguez Grossi, afirmó que se trata de "una inmoralidad pocas veces vista" y lo calificó como "un escándalo de (grandes) proporciones, porque lo que señala es que la manipulación habría sido hecha por el economista a cargo de la construcción del ránking (Augusto López-Claro), con el objeto "de hacer ver un deterioro económico durante el Gobierno de Michelle Bachelet, con intenciones básicamente políticas".
El hecho de que López-Claro sea boliviano y haya trabajado en Chile hace levantar las sospechas en el Ejecutivo de Santiago de que habría motivaciones políticas tras todo este asunto. La presidente Bachelet, por su parte, reaccionó a través de Twitter señalando que la denuncia era "muy preocupante”, pues "daña la credibilidad de una institución que debe contar con la confianza de la comunidad internacional".
Romer comenzó a trabajar en el BM en octubre de 2016 y los cambios en informes pasados se remontan a años antes de su llegada a la organización.
DZC (EFE, La Tercera)