Biocombustibles: ¿bendición o condena?
5 de julio de 2007En Bruselas, el presidente de Brasil y representantes europeos suscribieron los términos de referencia para un diálogo bilateral permanente en materia energética. El Comisionado Europeo de Energía, Andris Piebalgs, dijo que "el documento sienta las bases para una asociación fructífera y constructiva en materia energética con la República Federativa de Brasil".
El nuevo mecanismo se inserta, según dijo el representante europeo, en el Acuerdo Marco de Cooperación firmado entre la Unión Europea y Brasil, en 1995.
El objetivo, dijo, es "facilitar el intercambio de puntos de vista entre ambas partes en todos los aspectos relacionados con la seguridad y sustentabilidad energética.
También se desarrollará la cooperación bilateral en áreas de interés común, notablemente en el uso de biocombustibles y otras fuentes de energía renovable." Piebalgs anunció que dentro de unos meses se llevará a cabo un encuentro complementario para dar seguimiento al acto de este jueves.
Problemas de sustentabilidad
No todo fue miel sobre hojuelas durante la ceremonia. El Comisionado Europeo para Medio Ambiente, Stavros Dimas, ennumeró algunos problemas relacionados con la producción de combustibles alternativos, y que afectan a países latinoamericanos. "Algunos biocombustibles son muy caros. La producción de petróleo actualmente cuesta un promedio de 30 centavos por litro. Para producir un litro de etanol con el mismo poder energético se necesitan 37 centavos en Brasil, 45 de Estados Unidos, y 75 en Europa."
Del mismo modo, "Brasil necesitaría 3 por ciento de su superficie agrícola para producir 10 por ciento de su consumo energético total. Para esto mismo, Estados Unidos necesitaría 30 por ciento de su superficie agrícola, y la Unión europea, 72 por ciento."
Dimas mencionó el caso de México, donde "se ha producido un incremento pronunciado en el precio de la tortilla, la principal fuente de calorías para 50 millones de mexicanos pobres. El mismo problema se ha presentado en otros países con considerables índices de pobreza."
¿Prevalecerán los biocombustibles?
Dimas consideró que la utilización de biocombustibles como el etanol sólo serán viables a largo plazo si se cumplen dos condiciones: sustentabilidad, y promoción de biocombustibles de segunda generación. De este modo "se hará que los biocombustibles sean algo realmente bueno para la sociedad, para el medio ambiente, y para la economía en su conjunto."
Además el presidente brasileño Luiz Inacio Da Silva, en Bruselas estuvo presente el secretario de Agricultura de la República Argentina, Javier de Urquiza. Su país es otro exportador importante de materias primas; por tanto, solicitó a los representantes europeos condiciones para promover un mercado a largo plazo para los biocombustibles.
Dijo que Argentina "se opone a cualquier incremento en los subsidios agrícolas". Aquí aopareció otra diferencia de opiniones: en su intervención, el comisario Stavros Dimas aseguró: "es claro que los biocombustibles producidos bajo las condiciones actuales solamente pueden ser sustentables y económicamente viables si son subsidiados."