Budapest alega que no tiene recursos para admitir refugiados
25 de junio de 2015El Gobierno húngaro aseguró que cumplirá la legislación de la UE en materia de inmigración pero advirtió de que actualmente no tiene recursos para recibir a los refugiados que les envíen de otros países comunitarios. "Hungría no tiene capacidad para aceptar los envíos" de refugiados, aseguró ante la prensa el ministro de Gobernación, János Lázár, en referencia al Reglamento Dublín III, que establece que es el país en el que un refugiado quedó registrado al entrar en la UE el que tiene que atender su petición de asilo.
De esta forma, el ministro matizó la confusa postura del Gobierno húngaro, que el martes anunció que suspendía la aplicación de Dublín III y al día siguiente rectificó y dijo que cumpliría todas sus obligaciones con la UE. El anuncio de la suspensión unilateral de ese reglamento provocó las críticas de Austria y Alemania, los países que son el destino final de la mayoría de refugiados que cruzan por Hungría. Austria. incluso, ha advertido que dará prioridad a la tramitación de estos casos, lo que supone que devolverá a Hungría a muchos solicitantes de asilo cuya entrada en la UE fue registrada en territorio húngaro.
En lo que va de año, Hungría ha registrado más de 60.000 solicitudes de asilo de inmigrantes (frente a 42.000 en 2014). Lázár reiteró que Budapest no está de acuerdo con que otros países europeos devuelvan a hasta 16.000 refugiados a Hungría, que cuenta con capacidad para atender a sólo 2.500. "Pedimos que los manden al país por donde entraron a la UE y no a Hungría", dijo Lázár, refiriéndose a Grecia.
El ministro de Exteriores húngaro, Péter Szijjártó, reiteró que Hungría respeta las leyes comunitarias y pidió a los países de la UE que "tengan un poco de paciencia" ya que el país hace todo lo que puede para afrontar esta situación. "Si esta presión disminuye, el país podrá cumplir con el Reglamento Dublín III", agregó.
Hungría quiere centrar la atención sobre la ruta terrestre que usan los sirios e iraquíes que huyen de la guerra en sus países y que recibe menos atención mediática que la llegada de refugiados por el Mediterráneo a Italia o Grecia. En relación con la valla anti inmigrantes de 175 kilómetros de largo que el país planea construir en la frontera con Serbia, Lázár dijo que "han comenzado los preparativos de construcción" pero que Hungría está abierta a negociar sobre el proyecto (efe).