Bundesrat aprobó cuota femenina en Alemania
21 de septiembre de 2012Por lo menos el 40 por ciento de los cargos en los consejos de administración de las empresas alemanas que cotizan en la bolsa de valores de Fráncfort serán ocupados por mujeres, si la mayoría de los integrantes del Bundestag votan a favor de un proyecto de ley promovido por los Estados federados de Hamburgo y Brandenburgo. En el Bundesrat, el órgano de representación de los dieciséis Länder germanos, se le dio luz verde a la moción este viernes (21.9.2012).
Aunque la instauración de una cuota femenina en las cúpulas empresariales ha sido defendida históricamente por los socialdemócratas, los verdes y la izquierda, esta medida fue respaldada en el Consejo Federal por los Gobiernos de Sajonia-Anhalt y Sarre, que están en manos de la Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU). Sin embargo, algunos analistas políticos opinan que el proyecto de ley en cuestión no será ratificado en el Parlamento federal.
El jefe de la Unión Social Cristiana (CSU), Horst Seehofer, y la ministra de Justicia, la liberal Sabine Leutheusser-Schnarrenberger, están entre quienes se oponen a imponer una cuota femenina en los consejos de administración; un tópico controvertido en buena parte del bloque comunitario. Hace más de un año, la Comisión Europea instó a las compañías a fomentar voluntariamente una mayor presencia de mujeres en los gremios más altos de su jerarquía, pero el llamado no fue atendido.
¿Una intromisión del Estado?
De ahí que Viviane Reding, comisaria europea de Justicia, planee medidas más persuasivas para el otoño boreal de 2012. Aquellos en contra de una legislación que obligue a integrar a más mujeres a los consejos de administración de las empresas sostienen que ésta terminaría perjudicando a quienes pretende beneficiar, creando la impresión de que las profesionales no pueden llegar a posiciones de mando sin la intervención del Estado y de que constituyen un grupo socialmente discriminado.
Aquellos a favor de la cuota femenina suelen refutar esos argumentos con una simple pregunta: si las mujeres no son discriminadas, ¿a qué se debe entonces que su número en los centros de decisión sea tan reducido? Muchos alegan que, al menos en Alemania, el hecho de que las mujeres se topen con un “techo de cristal” que les impide el ascenso profesional se debe única y exclusivamente al temor de las empresas a los costos por seguridad social que generan las embarazadas.
¿Qué dicen a eso los opositores de una cuota femenina en los consejos de administración? Que la misión de las empresas privadas es obtener ganancias y que, puertas adentro, sólo las compañías deben decidir quiénes ocupan los puestos de mando. El talón de Aquiles de esta tesis: el proyecto de ley que se aprobó en el Bundesrat no constituye una intromisión estatal en la economía de mercado; después de todo, la composición de los consejos de administración de las empresas está regulada por las leyes alemanas.
Autor: Evan Romero-Castillo
Editora: Cristina Papaleo