Caso Kurnaz: un ministro alemán en apuros
23 de enero de 2007La comisión especial del Parlamento Europeo que viene investigando desde hace un año los vuelos secretos de la CIA presentó su informe final: Los vuelos de la CIA entre 2001 y 2005 -sobre y desde territorio europeo- alcanzan la cifra de 1245, 336 de ellos con escalas en aeropuertos alemanes. Muy claramente se asevera, además, que Estados Unidos ofreció en el año 2002 al gobierno alemán la liberación del prisionero de Guantánamo Murat Kurnaz, quien no tenía ninguna relación con asociaciones terroristas. Esto, para Alemania, es lo más candente del informe.
El que se negara la entrada al prisionero Kurnaz -de origen turco, nacido y crecido en Bremen- es algo que, de probarse, debería costarle el puesto al actual ministro alemán de Exteriores, el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier. Por lo menos así lo exige la oposición.
En el año 2002, cuando Estados Unidos ofreció "devolver" a Kurnaz por no tener éste ninguna relación con Al Qaeda, Steinmeier era el jefe del gabinete del canciller Gerhard Schröder y encargado precisamente de coordinar las acciones de los servicios secretos. Es más, los oficiales alemanes del Servicio Secreto que interrogaron a este joven de, entonces, 19 años le negaron toda asistencia. ¿Por qué? ¿Por no detentar pasaporte alemán?
Steinmeier desmiente
Según información divulgada en diversos medios alemanes, la cancillería alemana habría respondido a la oferta de Estados Unidos con un nicht erwünscht, Kurnaz no era deseado en Alemania. Un miembro de la comisión investigadora del Parlamento, el liberal Alexander Álvaro, declaró a la agencia de noticias DPA que, muy probablemente, la comisión se basó en los mismos documentos que se manejan en medios alemanes.
Para repatriar a Murat Kurnaz no hubo una "propuesta formal" por parte de Estados Unidos, declaran una y otra vez los salpicados en este asunto. Que jamás se tocó el tema en el gabinete, declaró a la emisora Deutschlandradio el ex ministro alemán de Medioambiente, Jürgen Trittin.
El ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, negó que el anterior gobierno de coalición entre socialdemócratas y verdes recibiera una oferta de EEUU para liberar a Kurnaz y calificó de "inciertas e infames" las acusaciones. Hay que los atentados del 11 de septiembre se encontraban muy frescos, y asegurar que de Alemania no partieran nuevas amenazas terroristas tenía la prioridad.
No sólo, pero sobre todo Alemania
El asunto se ve mal. No sólo porque, de comprobarse, se trata efectivamente de un acto altamente inhumano e inconstitucional, sino porque todo indica que Murat Kurnaz -que aunque provenga de una familia turca nació, creció y se formó en Alemania- es la prueba viviente no sólo de la doble moral del gobierno de Berlín, sino también de una serie de irregularidades que violan tanto los derechos constitucionales, como las convenciones europeas. Si bien en el oscuro asunto de los vuelos de la CIA están implicados también otros países europeos -Italia, Gran Bretaña, Suecia, Austria, España, Portugal, Irlanda, Grecia, Chipre, Rumania y Polonia-, el capítulo dedicado a Alemania es uno de los más amplios.
La comisión parlamentaria condena que se haya aceptado estas prácticas ilegales y que los servicios secretos respectivos las hayan encubierto; recomienda la coordinación de los servicios secretos europeos así como indemnizar a las víctimas. Que el pleno del Parlamento aprobará el informe y sus recomendaciones es seguro; la pregunta ahora es si el asunto tendrá repercusiones o si se desvanecerá en el limbo donde se encuentran todas las "irregularidades" cometidas a alto nivel.