Clärchens Ballhaus: un lugar de culto en Berlín se toma un descanso
La “Casa de baile de Clarita” tiene más de 100 años de historia alemana. Ahora, este templo de la danza de Berlín, cierra por un periodo aún indefinido, debido a trabajos de renovación necesarios. Una reseña en imágenes.
¿Llegó ahora la gentrificación al salón de baile?
Aquí sí que se baila, de verdad. Pero este salón de baile, amado por su mórbido encanto, se despide, por ahora con un último baile. El edificio será renovado, así lo desea el propietario. El inmueble reabrirá sus puertas a finales de 2020, con un nuevo inquilino. A amantes de la “Casa de baile de Clarita” les preocupa que el antiguo encanto del salón de baile desaparezca después de la renovación.
Bailando a través de la historia
Desde su apertura, hace más de 100 años, la “Clärchens Ballhaus” ha deleitado a los huéspedes amantes del baile. Durante la Segunda Guerra Mundial, el salón de baile pasó por momentos difíciles y fue siempre una piedra en el zapato para los nazis. Después de la guerra, quedó atrapado en la Alemania Oriental.
La calle Auguststraße número 24
El 13 de septiembre de 1913 Fritz Bühler y su esposa, Clara Habermann, inauguraron el "Bühler's Ballhaus". El edificio se adaptaba perfectamente a su idea: con dos grandes salas de baile en dos plantas en la parte trasera de la casa, donde la música no molestaría a los vecinos.
¡Esta es Clärchen!
Clarita (sentada a la derecha) era un berlinesa apasionada por el baile. Siempre se la encontraba en la pista, bailando Charleston u otros ritmos populares. Ella se preocupaba siempre de que el ambiente fuera de fiesta, cada una de las noches de la semana.
Cambio de nombre
El "Bühler's Ballhaus" pronto se conoció como "Clärchen's Ballhaus", inspirado en el apodo de Clara. Bajo este nombre se convirtió en una institución entre los berlineses, aunque los nacionalsocialistas prohibieron bailar aquí varias veces. Al final de la Segunda Guerra Mundial, la fachada fue destruida por una bomba de los aliados y “Clärchen” tuvo que cerrar.
Berlín Oriental
Después de la guerra, "Clärchen" reabrió rápidamente. Aunque había quedado en el Berlín socialista, se le permitió permanecer en manos privadas. Durante la división de la ciudad, fue un lugar de encuentro popular para todos los berlineses, tanto del este como del oeste. Demasiado mayor para dirigir el negocio, Clara transfirió la propiedad a sus hijos.
Nuevos propietarios, la misma mentalidad
La reunificación alemana en 1989 provocó muchos cambios en Berlín, también en "Clärchen". La hija de Clara, propietaria del edificio y del negocio, los vendió ambos en noviembre de 2003, y la nueva dirección también modernizó el patio vacío con una reinterpretación del restaurante y la cervecería en el jardín original.
El histórico Salón de los Espejos
En 2018, el fotógrafo Yoram Roth compró "Clärchen". Cuando sea renovado, el Salón de los Espejos estará equipado con aire acondicionado para que pueda ser utilizado durante todo el año. Esperemos que las grietas y los agujeros en las paredes y los pisos se conserven. Porque son precisamente estas huellas históricas las que le dan ese mórbido encanto a la “Clärchens Ballhaus”.