En la colombiana Boyacá se puso en marcha el primer Centro de Innovación Agroalimentario del Foro Económico Mundial: una granja piloto que, con técnicas de agricultura regenerativa, se cuida la salud de los suelos, se ahorra agua y se protegen los ecosistemas. El objetivo principal es mejorar la productividad y rentabilidad de los agricultores. Muchos de los participantes son jóvenes de la zona.