Colonia prohíbe manifestación de ultraderechistas europeos
20 de septiembre de 2008
"La seguridad de nuestros coloneses está por encima de todo", explicó un portavoz policial. Entre 1.000 y 1.500 radicales de derecha habían sido convocados a una marcha en el centro de Colonia en el marco de una llamada "Conferencia Anti-Islamización" de tres días de duración.
Sin embargo, manifestantes de izquierda erigieron barricadas en torno al punto de encuentro en una plaza céntrica y atacaron a la policía destacada en el lugar. Al mismo tiempo, unas 5.000 personas acudieron de forma pacífica a un acto de repudio delante de la famosa catedral gótica de la ciudad.
“Triunfo de las fuerzas democráticas”
El alcalde de Colonia se manifestó aliviado de que fuese prohibida la marcha xenófoba. "Ésta es una victoria para Colonia, para las fuerzas democráticas de esta ciudad", dijo el político democristiano. "Sin embargo, lamento que algunos revoltosos hayan atacado a la policía".
Manifestantes vestidos de negro y con la cara tapada arrojaron piedras a los agentes antidisturbios e intentaron sustraerles las armas, pero fueron reprimidos a bastonazos. Un policía recibió heridas en la cara y se produjeron varias detenciones.
Los ultraderechistas en el Consejo de Colonia
La manifestación ultraderechista fue organizada por "Pro Köln", una agrupación compuesta por ex miembros de los ultraderechistas Partido Republicano y Partido Nacional Democrático de Alemania que consiguió cinco por ciento de votos en las últimas elecciones municipales.
Pese al anuncio de que esperaban más de un millar de participantes, la policía estimó que a mediodía se habían dado cita en la plaza Heumarkt de Colonia no más de medio centenar de radicales de derecha. Entre 100 y 150 simpatizantes ultraderechistas llegaron por avión pero por recomendación policial no se dirigieron al centro.
Júbilo: a Le Pen le tocó quedarse en casa
Tampoco estuvo presente en Colonia como había sido proclamado el dirigente francés Jean-Marie Le Pen. Los extremistas de derecha se oponen a la construcción de una mezquita de grandes dimensiones en esta ciudad, que cuenta con una populosa minoría turca musulmana y es considerada un ejemplo de multiculturalidad y tolerancia. Su equipo de fútbol, sin ir más lejos, está formado por jugadores de 15 países.