Condena internacional al atentado de Oslo
22 de julio de 2011"Noruega es conocida por fomentar activamente la paz en el mundo y este impresionante ataque no tiene precedente", dijo la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, este viernes en Bruselas.
Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, afirmó: "Un ataque de esta magnitud no es algo que se espera que suceda en Noruega."
Solidaridad europea
El presidente del Consejo, Herman van Rompuy, condenó "acciones de semejante cobardía para las que no existe ninguna justificación" y el presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, aseguró al país escandinavo la solidaridad de toda Europa, que, según dijo, está unida en la lucha contra cualquier forma de terrorismo.
"Noruega presta buenos servicios a favor de la paz en los lugares más álgidos del planeta. Lo último que se merece es un atentado en su propio territorio", criticó Buzek.
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, también condenó lo que consideró un horroroso acto de violencia, e hizo llegar sus condolencias a las familias afectadas.
Obama recuerda responsabilidad internacional
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, condenó igualmente los ataques perpetrados en Noruega y subrayó que son un "recordatorio" de que la lucha contra el terrorismo es responsabilidad de toda la comunidad internacional.
La explosión de una bomba en el centro de Oslo y el tiroteo en un campamento juvenil al oeste de la capital noruega, que según la policía local están relacionados, "son un recordatorio de que toda la comunidad internacional tiene responsabilidad en evitar que se repita este tipo de tragedias", dijo Obama en la Casa Blanca.
"Tenemos que trabajar de forma conjunta tanto en materia de inteligencia como en prevención de este tipo de ataques horribles", insistió tras reunirse con el primer ministro de Nueva Zelanda, John Key. Por su parte, Key señaló que si efectivamente se confirma que los ataques en Noruega corresponden a un acto de terrorismo coordinado, "esto demuestra que ningún país, ya sea grande o pequeño, es inmune" a este tipo de ataques. (dpa)
Editora: Emilia Rojas