Conferencia Internacional de la Bicicleta
22 de septiembre de 2017Crear un puente entre la teoría y la práctica fue el objetivo de la primera conferencia internacional sobre la bicicleta que se llevó a cabo esta semana en la ciudad alemana de Mannheim, con motivo de la celebración del segundo centenario de esta invención.
La salud, los beneficios económicos, la seguridad, los sistemas para compartir bicicletas, la intermodalidad, las políticas y estrategias, el diseño de infraestructuras, y el comportamiento de los ciclistas fueron algunos de los aspectos que se analizaron a través de estudios y ejemplos concretos de iniciativas que se están llevando a cabo en diferentes partes del mundo. Entre ellos destacó el proyecto colombiano de la creación de la primera carretera para bicicletas de América Latina, llamada 'Quinto Centenario' con vistas a ese aniversario de la fundación de Bogotá.
Con una extensión de 27 kilómetros, la ruta unirá el sur y el norte de la capital colombiana, desde el Parque El Tunal hasta la Calle 170. Con una previsión de 30.000 usuarios diarios, permitirá ahorrar "67.000 toneladas de emisiones de efecto invernadero de 2017 a 2030”, según explicó Sarah Schneider, asesora para el fondo 'Cities Finance Facility' de la red de ciudades C40. Además de las ventajas medioambientales, también aportará beneficios sociales con el "acceso oportunidades laborales para la gente que vive en el sur y en el norte”.
El proyecto es uno de los ganadores de la primera convocatoria del fondo 'Cities Finance Facility' (CFF) que promueve la adopción de acciones y medidas efectivas para luchar contra el cambio climático en las ciudades. Para ello, Bogotá cuenta con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo, la Agencia de Cooperación Alemana GIZ y C40 para el diseño y la definición de la estrategia de financiación, así como un aporte de 3.500.000 euros del Ministerio alemán de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) y 2.300.000 milones de dólares de USAID que financian el fondo CFF. Se prevé que se inicie su construcción, con una duración de dos años, a finales del próximo año. Es "una infraestructura muy completa” que tiene un "impacto transformador de la ciudad”, aseguró la alemana, destacando que puede ser "un ejemplo que otras ciudades pueden replicar”.
Un proyecto ambicioso
Para Carlos Felipe Pardo, director de la fundación colombiana Despacio, se trata de "un reto muy grande que necesita financiación gigantesca”. Pardo, que ha colaborado en el proyecto aportando datos de los usuarios, dio a conocer algunas cifras de la situación de esta modalidad de transporte en la ciudad. "En Bogotá se hacen más de 600.000 viajes al día, el perfil del usuario es un hombre de entre 25-35 años con baja adhesión al riesgo y el 23 por ciento son mujeres”, explicó, apuntando que "está bien distribuido a nivel de ingresos, no es gente pobre como hace 20 años”. Igualmente, subrayó que, aunque los usuarios destacan factores como la practicidad, los beneficios de salud y la reducción del tiempo de viaje, también existen barreras para el uso de este medio de transporte. "La gente no toma la bicicleta por seguridad personal, vial, el clima y la actitud de los conductores de carros”, puntualizó.
Pardo criticó los numerosos retos que debe afrontar la ciudad en este ámbito, que pasan por designar financiación, mejorar datos y la institucionalidad.
Una herramienta para el cambio social
En la caótica Ciudad de México se llevan a cabo 22 millones de trayectos diarios, pero tan solo el tres por ciento son en bicicleta, según los datos de la 'Encuesta Origen-Destino' de 2007 citados por Alejandra Leal, codirectora de la consultora Céntrico. "Siempre ha habido ciclistas pero andan en bicicleta en condiciones de poca seguridad”, apuntó, señalando que su número se está incrementando tras puesta en marcha del servicio de transporte público Eco-Bici. Lanzado en 2010, cuenta con 450 estaciones y 6.000 bicicletas. No obstante, "está bajando el número de personas usuarias del transporte público, que está congestionado, pero no del vehículo particular” matizó, puntualizando que "el 30 por ciento de los viajes se hace en auto”.
La mexicana apuntó que en Europa el uso de la bicicleta "se enfoca en el medio ambiente”, pero aquí "no solo estamos hablando de cambio climático, sino de equidad, acceso de nuevas oportunidades...”.
Lake Sagaris, profesora de la Pontificia Universidad Católica de Chile, explicó que, aunque en su país el tema "pasó a ser elemento de política pública reconocida”, existen pocas infraestructuras y no se planifica integralmente. "Para planificar la sostenibilidad se necesita coordinación en el uso del suelo, la salud, el transporte, la educación, la integración social”. Pero "los ministerios no hablan entre sí, compiten y cada municipalidad tiene trocitos de ciclovías que no se conectan entre sí”, lamentó.
A pesar de la existencia de una buena red, ésta no cuenta con buenas intersecciones entre sí, un problema que se repite en las anteriores capitales latinas mencionadas, a las que hay que añadir la española. "Madrid le ha dado la espalda a la bicicleta, llevamos muy poco recorrido”, reconoció Sergio Fernández, portavoz de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid. Se tiene que "integrar la bicicleta con el planeamiento urbanístico, la gobernanza y el transporte público”, agregó. En este sentido, el lanzamiento del sistema de bicicletas (BiciMAD), que actualmente cuenta con 2028 bicicletas eléctricas y 13.000 usuarios diarios, "ha servido para impulsar políticas del uso de la bicicleta en la ciudad y construir más infraestructura”. No obstante, existen varias zonas inconexas por lo que "el desafío para el uso de la bicicleta está en relación con las comunicaciones del centro de la ciudad a la periferia: de ser una alternativa real al uso del coche”.
Autora: Judit Alonso (ER)