Cumbre Iberoamericana: España tiende puente hacia Europa
21 de noviembre de 2004La XIV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno arranca con entusiasmo diezmado por importantes ausencias. No obstante, se espera que la cumbre de un paso importante y supere el nivel protocolario con la creación de la Secretaría General Iberoamericana.
El candidato de mayor consenso para presidirla es el uruguayo Enrique V. Iglesias, una vez concluido su mandato al frente del Banco Interamericano de Desarrollo. Esta oficina con sede en Madrid hará un seguimiento de objetivos para dejar atrás la falta de concertación política para que Iberoamérica se convierta en un actor internacional.
Notables ausencias
La celebración paralela del Foro Asia Pacífico (APEC) en Santiago de Chile y una serie de reuniones bilaterales de alto nivel impiden la presencia de Ricardo Lagos (Chile), Alejandro Toledo (Perú), y Luiz Inacio Lula da Sila (Brasil). El venezolano Hugo Chávez fue obligado a cancelar su participación luego de que un fiscal que investiga el intento de golpe contra su gobierno muriera en un atentado el jueves. Mientras que la ausencia de Fidel Castro ya no sorprende, el portugués Jorge Sampaio canceló el viaje por motivos de salud.
Contradiciendo a quienes acusan a las cumbres de inutilidad, el canciller español, Miguel Angel Moratinos, afirmó que la de San José será "histórica" y "un salto cualitativo", entre otros, porque aprobará los estatutos de la Secretaría General Iberoamericana. La nueva estructura deberá estar operativa en la próxima cumbre, a celebrarse en Salamanca.
Puente con Europa
Según los analistas, sobre España recae la responsabilidad de que América Latina no desaparezca por completo de la agenda externa europea, concentrada en su ampliación hacia el este y la aprobación de su Constitución.
Por lo tanto España, que junto con México impulsó esta cita anual, se mantiene firme en su papel de eslabón entre América Latina y Europa. En San José, el Presidente José Luis Rodríguez Zapatero se mostró convencido de que la Cumbre "va a representar para Iberoamérica un paso adelante en el objetivo más importante que tienen los ciudadanos iberoamericanos: la paz y la democracia social".
El reto de la educación
La educación ocupa en este sentido el centro de la atención en la cumbre actual. Se trata de romper el círculo vicioso en una región de millones de analfabetos, masivas deserciones escolares y sistemas pedagógicos muy precarios.
Para superar esta valla al desarrollo sostenible se espera que la declaración final retome la propuesta de canjear parte de la deuda externa de los países latinoamericanos por un incremento en la inversión en educación pública.
La iniciativa es respaldada por organismos como la OEA y la UNESCO. Asimismo Brasil, Perú, Bolivia, México y España están entre sus primeros defensores. La meta es que para la próxima cumbre en la ciudad española de Salamanca en el 2005 se genere una Comisión Mixta de países deudores y acreedores para concertar una propuesta conjunta que haga viable la iniciativa.