Cómics y disidencia en la RDA
25 de abril de 2009En comparación con el material creado en la RFA, puede decirse que en la RDA hubo menos cantidad, pero más calidad y significados más profundos. Algunas de las series creadas en la RDA todavía hoy pueden adquirirse en las librerías, y siguen contando con una gran público fiel.
El origen del gran título
La publicación de cómic más importante en la RDA durante la Guerra Fría fue MOSAIK, revista que hoy día sigue saliendo al mercado y que se convierte, de este modo, en el cómic de mayor duración en Europa. Como es lógico, durante todos estos años, la revista ha sufrido cambios, e incluso un cambio radical en sus personajes e historietas.
Creado en 1955 por el dibujante y caricaturista Hannes Hegen, el cómic MOSAIK era protagonizado por tres personajes sedientos de aventuras: Dig, Dag y Digedag, que en conjunto se proclamaban Los Digedags. Siempre recorriendo los rincones más diversos del mundo, cada historieta era un nuevo viaje. Se trataba de una serie tan popular que llegó a rozar el millón de ejemplares por tirada.
Un cambio de pasajeros
En 1975, Hegen dejó Mosaico debido a un discrepancia con al editorial, y con él se fueron también los Digedags de la revista. No obstante, la publicación, lejos de abandonar el exitoso proyecto, contrató a la dibujante Lona Rietschel y al escritor Lothar Dräger, y juntos crearon la siguiente generación de MOSAIK, cuyos representantes pasaron a ser otros tres peculiares personajes: Abrax, Brabax y Califax, que en conjunto se denominaban Los Abrafaxe.
Hoy día, estos tres aventureros jóvenes siguen protagonizando las páginas de MOSAIK, aunque con una tirada inferior a los primeros años.
Política en el cómic
Sin embargo, como es natural, no sólo se leyeron cómics de aventuras durante este turbulento periodo histórico de la República Democrática Alemana.
La crítica política también fue tema recurrente, especialmente en la revista mensual para jóvenes Atze. Eran usuales las historietas que representaban la vida diaria en la RDA, la historia del movimiento obrero o la corriente de resistencia comunista antifascista.
Prueba de ello era el eslogan con el que la revista salía a la venta: “Quien quiera Fix y Fax, debe comprar un medio folleto de propaganda”. Fix y Fax, dos ratoncitos de aspecto inocente e infantil, eran los protagonistas de la serie más popular de la publicación, creada por Jürgen Kieser. La propuesta de Atze fue un éxito.
Públicos menores
Hasta los años 80, entre los cómics para los más pequeños en la RDA predominaron los de contenido sencillo y sin un mensaje especial entre líneas. Entre ellos sobresale la serie Fix y Foxi, de Rolf Kauka, que aunque comparta un título similar con la anteriormente mencionada Fix y Fax, se trata en este caso de dos simpáticos zorros de color rojo, hermanos gemelos de buen corazón y comportamiento ejemplar que actuaban como modelo para su joven público. La serie goza todavía de gran popularidad y un club oficial.