Doris Lessing: reacciones encontradas
11 de octubre de 2007
La escritora británica, Doris Lessing, de 87 años, reaccionó a la concesión del Nobel diciendo que era como “una escalera real”, aludiendo con ello a la mejor mano en el poker. “Así ha sido durante los últimos 30 años, he ganado todos los premios en Europa, todo maldito premio”, dijo Lessing al bajarse de un taxi frente a su domicilio en el norte de Londres. Lessing dijo sentirse emocionada de haber recibido el Premio Nobel de Literatura.
Premio merecido
También su editor Nicholas Pearson se mostró emocionado con la noticia, aunque dijo que el reconocimiento lo sorprendió, “No contábamos con ello pero sin duda es merecido”, dijo el director de la editorial 4th. Estate, que pertenece al grupo editorial Harper Collins, durante la Feria del Libro de Fráncfort. Pearson dijo que Lessing es una de las personas más amables que ha conocido en su vida y como autora ha tenido grandes logros, “cuya obra nos ha permitido echar un vistazo a la vida interior de las mujeres”, dijo.
Ciertamente que la galardonada no se encontraba en las apuestas de nadie, pero el escritor italiano Umberto Eco, que presentaba la versión en alemán de su libro, Historia de la fealdad, fue el primero en reaccionar señalando que la escritora británica es una “merecida premiada” a quien elogió como “una gran y singular alma literaria”. El autor de El nombre de la Rosa, no ahondó más en el tema.
Una elección decepcionante
El crítico de origen polaco Marcel Reich Ranicki, la máxima autoridad literaria en Alemania, temido y respetado por igual, se mostró decepcionado. Reich Ranicki dijo en Francfort que el mundo anglosajón cuenta con escritores más relevantes. Dijo haber leído sobre Doris Lessing “tal vez unos tres libros, eso fue hace mucho y nada me impresionó realmente”, señaló.
El crítico mencionó a Philip Roth o a John Updike como mejores candidatos y reconoció que las decisiones de la Academia Sueca ya no le sorprenden, pues ya ha tenido otras decepciones a lo largo de los últimos años en donde la concesión del Nobel fue “totalmente incomprensible”. Como ejemplo mencionó al dramaturgo italiano Darío Fo y a cierta escritora de lengua alemana, sin mencionar por su nombre a la austriaca Elfriede Jelinek, galardonada en el 2004.
Reconocimiento tardío
“Una buena decisión, pero que llega 20 años tarde”, resumió la crítica literaria Denis Scheck, quien señaló que aunque políticamente es una elección acertada al tratarse de una pionera del feminismo y luchadora contra el racismo, desde el punto de vista estético, “la decisión es un desastre”.
Doris Lessing, casada con el comunista alemán Gottfried Anton Nicolai Lessing, tiene en Alemania un sobrino político, el líder socialista, Gregor Gysi, cuya madre, Irene, era hermana de Gottfried. Gysi felicitó en el pleno del Parlamento a su tía, diciendo que se alegraba de tener un Nobel en la familia. El líder del partido Die Linke, dijo que vio a su tía la semana pasada en Hamburgo y que ha leído todos sus libros. Mantiene contactos con ella desde los tiempos de la RDA (República Democrática Alemana), y dijo que en plena Guerra Fría, Doris Lessing ofreció a su madre y a su hermana la posibilidad de que emigraran a Gran Bretaña, donde estarían más seguras. “Un gesto sumamente generoso”, dijo Gysi. En su autobiografía, el elocuente político describe a Doris Lessing como una mujer introvertida que irradia una gran inteligencia.