Dos llamados de atención
21 de noviembre de 2006Así, el Märkische Allgemeine, de Potsdam, señala que "el hecho de que afortunadamente se haya evitado un infierno provocó que la amenaza subjetiva del terrorismo internacional aquí no sea tomada tan en serio como en otros países. Pero, como de nuevo se nos recuerda de manera urgente, aún no hay razón para levantar la alerta."
El Tagesspiegel, de Berlín, sobre el mismo tema: "Las democracias occidentales debe hacer todo lo que esté de su parte por aminorar, por lo menos, el peligro. Esto puede significar que también los trabajadores de las compañías aéreas deban ser sometidos a pruebas de confianza más meticulosas. Para los encargados de la política exterior, el caso actual debe constituir una advertencia a fin de que que intervengan con toda la fuerza que les es posible con el objetivo de encontrar una solución pacífica al conflicto entre palestinos e israelíes. O por lo menos, para mitigar un tanto el odio."
El Nordkurier, de Neubrandemburg, opina: "El caso parece tener dos caras. Por una parte deja en claro que también Alemania se encuentra en una encrucijada por el tema del terrorismo. Quien haya creído que Alemania estaba menos amenazada que, por ejemplo, Estados Unidos o Inglaterra, debe aprender de las pistas publicadas por la Fiscalía Federal. Alemania es también, por supuesto, objetivo de los terroristas. Pero por otra parte, el éxito de las investigaciones demuestra que el concepto alemán en materia de seguridad funciona. A diferencia de Estados Unidos, donde cualquier forma de peligro trae consigo una limitación masiva de los derechos ciudadanos, el método alemán demuestra que es posible implementar una reacción entre la mayor libertad posible y la seguridad necesaria."
El caso Emsdetten
Como es evidente, la opinión pública alemana debate sobre el ataque a una escuela por parte de uno de sus alumnos. El Lübecker Nachrichten, de Lübeck, considera lo siguiente: "En éste y otros casos similares, hay un común denominador: los atacantes son sujetos solitarios que se sienten perdedores. Opinan que se les ha despojado de toda oportunidad y desean cobrar una venganza espectacular a toda costa. Si acaso es posible formular alguna estrategia preventiva, ésta consiste en que los psicólogos escolares deben intervenir en un primer momento ante cualquier joven atormentado. Pero aún más importante es lo siguiente: la sociedad no debe producir jóvenes solitarios y perdedores."
El Badischer Zeitung sintetiza el estado actual de la discusión sobre el caso: "Ciertamente, no todo aquel que cercena, hiere o ahorca en la pantalla se convierte automáticamente en un asesino. Pero la pregunta está abierta: ¿qué efectos permanentes pueden tener en los individuos las largas temporadas dedicadas a los videojuegos?"