El centro de Berlín, ¿usurpado?
Hoy, el distrito de Berlín Mitte es una gran zona en construcción. Pocos saben que la mayoría de las propiedades en el centro de la capital alemana fueron robadas a familias judías.
Una capital sin centro histórico
Actualmente, el distrito de Berlín Mitte es sinónimo de construcción. Cerca de la torre de TV y del ayuntamiento, los andamios abundan. La mayoría de la gente, sin embargo, no sabe que muchas de las propiedades de este barrio le pertenecieron a familias judías. Hoy se les saca provecho sin tener en cuenta a sus antiguos dueños. Este es el tema de una provocadora exposición.
Exclusión planificada
De los 1.200 edificios del centro de Berlín, al menos 225 pertenecieron, antes de 1933, a judíos alemanes. Después de la llegada de Adolf Hitler a la Cancillería, los judíos fueron sistemáticamente excluidos de la "comunidad nacional". Como resultado de ésto, debieron registrar sus propiedades, las que luego les fueron confiscadas.
Perseguidos y sin ciudadanía
Una de las estrategias utilizadas por los nazis para acceder a la propiedad de los judíos fue quitarles la ciudadanía, forzándolos a emigrar como enemigos del Estado y confiscándoles, de este modo, sus bienes. Aquellos que no abandonaron Alemania, sufrieron en 1938 durante la Noche de los Cristales Rotos, una fecha en la que se destruyeron casas y comercios judíos.
El sueño de Germania
¿La razón de la nacionalización de los edificios? El arquitecto favorito de Hitler, Albert Speer, estaba empeñado en la construcción de una nueva capital imperial: Germania. En los planos, el centro histórico sería reemplazado por edificios administrativos monumentales. El punto central sería el Pabellón del Pueblo.
El eje Este-Oeste
Para conseguir sus sueños, Hitler nombró a Speer como Inspector General de Berlín. Todas las casas de judíos en la capital fueron registradas y reportadas a Speer para que éste considerara si el Estado ejercería su derecho a confiscarlas. Si esas propiedades estaban en el planificado eje Este-Oeste, que serviría de arteria principal de la capital, entonces serían destruidas.
Descubrimientos valiosos
En medio de las excavaciones en el ayuntamiento, en 2010, fueron halladas once esculturas calificadas por los nazis como "arte degenerado". Las obras habían sido confiscadas en 1937 desde museos y colecciones privadas y reportadas perdidas o destruidas. En el lugar del hallazgo había antes una propiedad judía, cuyos dueños originales fueron expulsados del país durante el régimen nazi.
Una ciudad en ruinas
Donde antes había casas de judíos el paisaje dio paso a enormes lotes baldíos. Ya sea porque las edificaciones fueron arrasadas por los planes de Germania, por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial o porque el régimen comunista de Alemania Oriental las convirtió en ruinas tras la guerra.
La Alemania socialista no pagó restituciones
Alemania Oriental, o "RDA", no pagó restituciones tras el Holocausto. ¿El argumento? En el país comunista no debía existir la propiedad privada. Por eso era mejor que todo fuera del Estado. Tras la reunificación, en 1990, cuando los herederos de los dueños originales de las propiedades exigieron restituciones, éstas fueron mínimas, si es que las recibieron.
Una mina de oro
En la actualidad, aquellos lotes baldíos se han vuelto valiosos terrenos para nuevas construcciones en Berlín Mitte. La exhibición "Robbed Centera" se pregunta si las restituciones no debieran ser renegociadas con los dueños originales, o si los dineros de esas ventas no debieran llegar a manos de fundaciones.