El espíritu del ‘68
El año 1968 marcó a una generación en casi todo el mundo. Reprimidas en más de un sentido durante mucho tiempo, millones de personas iniciaron de golpe proyectos emancipatorios y asumieron visiones de mundo liberadoras.
Eros en pantalla gigante
En 1968, Oswalt Kolle llevó al cine la primera parte de su película educativa “La maravilla del amor (Das Wunder der Liebe). La presentación de actos sexuales en la pantalla gigante constituyó una pequeña revolución en Alemania. Un fiscal llegó al punto de amenazar a Kolle con encarcelarlo, pese a que el director se esmeró en que la obra no fuera percibida por los espectadores como pornografía.
La Guerra de Vietnam y sus opositores
La brutalidad de las potencias mundiales y de sus aliados en la Guerra de Vietnam consiguió movilizar a los pacifistas en todo el mundo. En este hito fotográfico del año 1968, el presidente de la Policía de Saigón ejecuta a un miembro del Vietcong. Imágenes como ésta generaron reacciones que a su vez obligaron a Estados Unidos a detener los bombardeos en Vietnam y a buscar la manera de negociar.
Radicalización política
Muchos jóvenes asumieron posturas radicales de cara al conservadurismo de la sociedad alemana de posguerra y a la política exterior de las potencias occidentales. Algunos de ellos se tornaron violentos: un grupo de activistas de izquierda en torno a Andreas Baader y Gudrun Ensslin incendiaron dos centros comerciales en Fráncfort del Meno (foto) para llamar la atención hacia la Guerra de Vietnam.
Revueltas de estudiantes
Extremistas de izquierda como Baader y Ensslin eran mal vistos por muchos de sus compatriotas; pero el carácter pacifista del líder estudiantil Rudi Dutschke no impidió que él fuera blanco de campañas de odio orquestadas por la prensa germana. De hecho, tras ser herido en un atentado –en abril de 1968–, la editorial Springer fue acusada de haber propiciado el ataque con su cobertura periodística.
Contra el silencio
El movimiento estudiantil alemán también demandó que se discutiera públicamente sobre el legado del Tercer Reich. Contra el silencio prevalente luchó la periodista y autoproclamada “caza-nazis” Beate Klarsfeld. En esta foto, ella tacha de “nazi” y “criminal” al entonces canciller Kurt Georg Kiesinger, otrora miembro del NSDAP. Meses más tarde, Klarsfeld consiguió darle una bofetada.
La muerte de un predicador
El 4 de abril de 1968, el líder estadounidense Martin Luther King es asesinado en Memphis. Los activistas antirracistas del movimiento de defensa de los derechos civiles atribuyen corresponsabilidad del Estado en el homicidio. En más de cien ciudades de EE. UU. tienen lugar revueltas violentas con numerosos heridos y muertos. En la imagen, King encabezando una marcha en marzo de 1968.
Una primavera sin verano
Alexander Dubcek quería reformar a Checoslovaquia. Su objetivo: un “socialismo con rostro humano”: menos centralización estatal, más libertad. Pero en agosto de 1968, las tropas que apuntalaban al Pacto de Varsovia llegaron a Praga y la Unión Soviética obligó a Dubcek a suspender todas sus reformas. Tras la mayor operación militar de posguerra en Europa, la “Primavera de Praga” llegó a su fin.
Himnos de la revolución
En 1968, “Hey, Jude” se convirtió en la canción más popular del año y en el best-seller de Los Beatles: del sencillo se vendieron 7,5 millones de copias alrededor del mundo. El tema grabado en el lado B de ese disco era “Revolution”, que recogía como pocos el espíritu de los tiempos: “Todos queremos cambiar el mundo”.
Trueno papal
Las pastillas anticonceptivas le brindaron a las mujeres una libertad sexual sin precedentes, no solamente en las universidades y en las comunas hippies. De ahí la fiereza de las reacciones contra la encíclica papal de Pablo VI, “Humanae Vitae”, donde el Vaticano condenaba toda forma de contracepción. En adelante, la Iglesia católica no ha dejado de ser vista como una institución anacrónica.
Autoconocimiento
En la Navidad de 1968, la tripulación del Apollo 8 tomó esta foto y la tituló “La salida de la Tierra”, contrastando su privilegiada perspectiva del mundo con la del resto de los humanos, quienes hasta entonces sólo conocían la salida del Sol en el horizonte. Todavía hoy se discute sobre la influencia que esta imagen ha tenido sobre la percepción que la especie humana tiene de sí misma desde 1968.