El Gobierno y el consumo en descenso
27 de noviembre de 2002
La nueva encuesta del instituto alemán Forsa ratifica la mala prensa que cada día recibe Berlín. A sólo dos meses de vencer las segundas elecciones consecutivas, el Gobierno alemán sufre en las encuestas por su aparente mal manejo de las finanzas, así como por las perspectivas a la baja para la economía del país. El claro ganador es la oposición.
Deterioro dramático del SPD...
El electorado alemán está más que descontento. Si ahora se celebrasen elecciones, uno de cada dos votantes se inclinaría por la Unión Cristianodemócrata. Tan sólo en la última semana, la CDU logró sumar 2% a la intención de voto actual. Es exactamente la cifra que perdió el Partido Socialdemócrata del Canciller federal Gerhard Schöder. Hoy por hoy, el SPD sólo logra convencer al 28% del electorado. Esto representa un desplome notable de 10,5% desde las elecciones del pasado 22 de septiembre.
Para los demás partidos políticos, los resultados de la encuesta permanecen prácticamente invariados, exceptuando al partido liberal (en la oposición). El FDP recuperó 1%, aunque debido a una escándalo interno sigue captando 2,4% menos que en la pasada cita electoral.
...por el déficit presupuestario...
Los alemanes no confían en las medidas anunciadas para combatir el déficit presupuestario, que supera el 3% impuesto como límite en el marco del pacto de estabilidad, suscrito por los 12 países que conforman la Zona Euro.
Sólo un 8% de los encuestados confía en que el Gobierno podrá mejorar la situación, frente a una 85% que pide pasos más convincentes. Los más recientes estudios económicos nacionales e internacionales dan malas calificaciones a la gestión del equipo económico de Gerhard Schröder, que asimismo sufre la acusación de haber incurrido en gastos innecesarios por 2.000 millones de euros en los últimos años.
El Gobierno acaba de anunciar su intención de elevar una serie de impuestos y tributos, y de reducir los gastos en ciertos sectores para enfrentar la precaria situación fiscal. Pero la mayoría de los consumidores parece desconfiar y teme que el ajuste de cinturones continuará en las próximas semanas.
...que afecta al consumo
Un reflejo directo es la intención de consumo, precisamente en los primeros días de la temporada navideña. La gente no quiere comprar. Según la encuesta de Forsa, un 56% de los alemanes va a gastar menos que en la Navidad del año pasado. Sólo un 6% declara disponer de más ingresos disponibles, mientras que un 35% gastará lo mismo.
El actual clima adverso al Gobierno, conformado por socialdemócratas y verdes, es el más severo que se recuerda en décadas, si no es que desde finales de la Segunda Guerra Mundial. Así, los resultados de la encuesta de Forsa vienen a confirmar la especulación de numerosos comentaristas alemanes y europeos, que ven serias trabas para que Gerhard Schröder pueda revertir el ánimo nacional. Incluso hay quienes dudan que el Gobierno pueda llegar al final de su mandato.