El ocaso de Arafat
19 de julio de 2004The Daily Telegraph, de Londres, plantea: "Este diario se ha inclinado durante largo tiempo por el modelo de dos estados, que permitiría a israelíes y palestinos vivir unos junto a otros, contando cada uno con fronteras seguras. Cada vez se vuelve más claro que semejante solución será imposible mientras Arafat siga ejerciendo su perjudicial influencia. Israel ha hecho todo lo que ha podido por neutralizar a ese viejo caballo de batalla. (...) Ahorta quizá los palestinos tengan éxito allí donde fracasaron los israelíes, y dejen de lado al hombre que constituye el mayor obstáculo para la paz."
Una oportunidad
El Frankfurter Rundschau, de Francfort del Meno, opina: "Secuestros en protesta por la corrupción, anarquía como consecuencia de ínfulas arrogantes: el jefe de la OLP tiene una considerable cuota de responsabilidad por estos problemas. Son la consecuencia de su testaruda resistencia a poner en marcha reformas. Arafat no quiere renunciar a sus prerrogativas de poder por ningún motivo. Si nada se mueve en el terreno político, la situación tarde o temprano estalla en violencia. Con bastante frecuencia Arafat se ha beneficiado de ello, (....) presentándose a la postre como un patriarca. Es probable que también esta vez apueste por esa táctica. El que dé resultado dependerá de cuán maduras estén las nuevas generaciones de políticos. Esta crisis alberga al menos la posibilidad de poner límites a un envejecido líder guerrillero sin visiones. Sería la oportunidad de refutar las afirmaciones israelíes de que no hay interlocutor en el bando palestino. Una piedra se ha echado a rodar. Eso no implica que Arafat caiga, pero quizás surja un nuevo equilibrio entre su camarilla, mayoritariamente corrupta, y los reformistas ávidos de democracia."
Cansancio palestino
El diario económico Handelsblatt, de Düsseldorf, opina: "Arafat podría volver a intentar hacer frente a la creciente oposición popular dando un salto adelante. Hace cuatro años, utilizó la intifada para distraer de su incapacidad para mejorar las condiciones de vida de los palestinos. La lucha contra la ocupación israelí fortaleció su posición en el plano interno y los reproches de corrupción cayeron en el olvido. Sólo que ahora Arafat ya no podrá usar esa válvula. Los palestinos están cansados. Si Arafat no les puede ofrecer una vida mejor, le darán definitivamente la espalda."
Agonía política
El País, de Madrid, apunta: "Nadie le negará su capacidad de supervivencia al presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat. Pero los últimos días marcan el principio de una agonía política que puede ser muy rápida y que cada vez desean más interlocutores del propio Arafat, en Israel y en Estados Unidos, pero también en Europa. Las revueltas de los dos últimos días en los territorios ocupados son, sin duda, el mayor levantamiento interno palestino contra un rais que cree poder permitirse todo con los suyos sin tener que responsabilizarse de nada."