UE impone embargo petrolero a Siria, “sin consecuencias para Europa”
2 de septiembre de 2011Publicidad
Quedan prohibidos "la compra, importación y transporte de crudo y de otros productos petroleros de Siria", dice el texto del acuerdo adoptado por los titulares de Exteriores de la Unión Europea (UE), reunidos en Sopot, Polonia, que preside el bloque este semestre. Pero el embargo, que será válido desde este sábado (03.09.2011), solamente afectará de inmediato a los nuevos contratos, informa la agencia británica de noticias Reuters.
A causa de presiones de Italia, la medida sólo entrará plenamente en vigor el 15 de noviembre, después de que venza un contrato de suministro de la compañía italiana ENI con el país árabe. Mientras tanto, los acuerdos de suministro en vigor seguirán operativos. La oposición italiana a la rápida entrada en vigor de la decisión generó malestar entre otros representantes europeos.
Adicionalmente, otras cuatro personas y tres entidades fueron añadidas a una lista que suma ahora una docena de empresas y casi 40 funcionarios, sancionados con la prohibición de entrada a la EU y la congelación de sus activos depositados en la región. Entre ellos no sólo se hallan sirios sino también iraníes, acusados de ayudar a reprimir las protestas populares contra el presidente Bashar al-Assad en Siria.
¿Consecuencias para Europa?
Aunque Siria no es un gran productor mundial de crudo, exporta a socios de la UE la mayor parte del petróleo que produce –un 95 por ciento estima la agencia de noticias afp. Entre sus compradores destacan Alemania e Italia, además de Francia y Holanda. Según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI), Damasco obtiene el 25 por ciento de sus ingresos estatales gracias a tales ventas.
A la inversa, aunque la mayor parte de las importaciones europeas desde Siria están relacionadas con el petróleo, éstas no representan una parte considerable del conjunto de importaciones de la EU. El pasado año, el bloque importó mercancías sirias por unos 3.600 millones de euros; de ellos, 3.300 millones en productos petroleros, informa la agencia de noticias alemana dpa. Pero las importaciones de petróleo sirio sólo representaron un 1,5 por ciento del total importado por el bloque, asegura la Comisión Europea.
De ahí que Europa no espere consecuencias del embargo para sus consumidores. “Ahora mismo contamos con una amplia oferta (de petróleo y derivados) en todo el mundo”, declaró el ministro austríaco de Exteriores, Michael Spindelegger, en Sopot. En la ecuación, se ha considerado también el hecho de que Libia debe ir retomando su producción petrolera, de cara al fin definitivo del conflicto armado (que la comunidad internacional considera cercano, pese a las últimas amenazas lanzadas por el ex líder libio, Muammar Gadafi).
Sin embargo, algunas petroleras de Europa parecen apostar a la supervivencia política de Assad en Siria, estiman analistas. Varios buques cisterna navegaban hacia Siria esta semana para entregar combustible o recoger crudo. Se trata de las mismas empresas, entre ellas Vitol, de Suiza, que acordaron suministrar combustible a los opositores de Gaddafi con la esperanza de que su apoyo sería recompensado tras el conflicto libio.
La británico-holandesa Royal Dutch/Shell, por ejemplo, opera un emprendimiento conjunto con la petrolera estatal de Siria y una empresa sino-india para producir crudo sirio ligero. Fuentes de la industria afirman que, pese al embargo de la UE, Shell planea continuar operando dentro de ese país mientras la UE no imponga sanciones sobre la cooperación con firmas sirias –lo que por ahora parece menos probable.
Siria, ¿como Libia?
Entretanto, este viernes volvieron a reportarse al menos seis muertes en protestas reprimidas en Damasco y otras ciudades sirias, informan opositores. Según Naciones Unidas, más de 2.000 civiles murieron desde el inicio de las protestas. Los manifestantes reclaman protección internacional luego de cinco meses de ataques del Ejército y la policía para reprimir a opositores, informa Reuters. Mientras, el presidente, Bashar al-Assad, atribuye los disturbios a "grupos terroristas armados".
“Siria debe ser parte de la reflexión de Naciones Unidas" había pedido ayer el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en una conferencia en París sobre el futuro de Libia. Para Zapatero, el ejemplo libio demuestra “que cuando la ONU toma decisiones con fuerza a través de su Consejo de Seguridad, logra su objetivo en algunos meses".
También el primer ministro británico, David Cameron, pidió imponer sanciones más duras al Gobierno de Bashar al-Assad, que aún no tiene suficiente rechazo ni en la Liga Árabe ni a nivel internacional, lamentó Cameron en entrevista con la cadena británica BBC. En Naciones Unidas no se ha logrado aprobar una resolución para prohibir viajes y congelar fondos, señaló el premier, que comparó la situación siria con la libia: "Hay un dictador que hace cosas horribles a la gente", pero la disposición a actuar es menor en el caso de Siria, destacó.
Autora: Rosa Muñoz Lima (dpa, reuters, afp)
Editora: Claudia Herrera Pahl
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