"Territorio en disputa"
26 de julio de 2011Hace diez días, manifestantes marchaban por las calles de Israel. Se trataba de una manifestación conjunta de palestinos e israelíes a favor de un Estado palestino, con cerca de 200 personas que portaban banderas israelíes y palestinas y exigían en hebreo y en árabe la libertad de Palestina.
Pero Israel hace oídos sordos a esta demanda, y parece que se hubiera despedido de una solución a partir de dos Estados basados en las fronteras de 1967. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificó al conflicto israelí-palestino de ‘insolucionable'. Según él, no se trata únicamente de la disputa por un territorio, sino del reconocimiento de Israel como Estado judío. Hasta tanto los palestinos no estén dispuestos a reconocerlo, no habría solución posible, dijo recientemente Netanyahu al escritor israelí Etgar Keret durante una visita a Italia.
¿Territorios ocupados o “disputados”?
El vice ministro de Exteriores israelí, Danny Ayalon, ratificó entretanto, en un video propagandístico, la posición de Israel acerca de que los territorios palestinos no están ‘ocupados' en el sentido que da a esta palabra el derecho internacional. “¿En manos de quién estaba Cisjordania cuando la conquistó Israel? ¿De los palestinos?”, pregunta Ayalon en internet. Su respuesta es que “en 1967 no existía ningún Estado llamado Palestina”.
La presencia israelí en Cisjordania es, según Ayalon, el resultado de una guerra de autodefensa, por lo cual ese territorio no debería ser considerado ocupado, sino, y esa sería la denominación correcta a su juicio, como un ‘territorio en disputa'. Dado que los israelíes, además, ya renunciaron a sus derechos de posesión, fundamentados históricamente, de la orilla oriental del río Jordán, ahora les tocaría a los palestinos demostrar su voluntad de llegar a un acuerdo, opina el vice ministro.
Autoridades palestinas: esperanzas puestas en la ONU
Las autoridades autónomas de Ramallah no están de acuerdo con esa postura y continúan con sus planes de fundar un Estado palestino en los territorios ocupados por Israel en 1967. Para ello, presentarán el caso ante la Asamblea de la ONU en septiembre de este año, como recalcó el presidente Mahmud Abbas hace unos días en Estambul. Abbas dijo, además, que está interesado en retomar las negociaciones con Israel, pero que, de no ser posible, recurrirá a las Naciones Unidas para reclamar sus derechos.
Sin embargo muchos palestinos critican estos planes, ya que dudan de que un reconocimiento internacional les otorgue más derechos. Para el periodista palestino Ali Abunimah, fundador de la plataforma de Internet Electronic Intifada, la demanda ante la ONU no es más que un gesto carente de contenido que demuestra el fracaso total de los Acuerdos de de Paz de Oslo.
“Es una medida sin sentido. No cambia absolutamente nada”, dijo Abunimah, que vive en EE. UU. El hecho de que se llegue a reconocer la existencia de un Estado palestino no hará que desaparezca ni un solo soldado israelí ni un solo colono de Cisjordania, agregó. “Y tampoco cambiará la situación de los refugiados palestinos y la de los ciudadanos palestinos de Israel, que se verían expuestos a una mayor discriminación”, señaló Ali Abunimah.
El llamado a las Naciones Unidas expresa la desesperación de las autoridades palestinas, luego de casi 20 años de fracasos en las negociaciones, opina el periodista. Y la culpa la tiene también, según él, la comunidad internacional, que hasta ahora desistió de exigir a Israel que respete el derecho internacional. Especialmente el IV Convenio de Ginebra, relativo a los derechos y obligaciones de las potencias ocupantes de territorios.
“Israel viola la IV Convención de Ginebra y, por cierto, a Alemania le toca una responsabilidad especial que debería asumir, como Estado y como sociedad civil, ya que la IV Convención de Ginebra se creó, en parte, como respuesta a los crímenes cometidos por la Alemania nazi durante la II Guerra Mundial, y Alemania, como firmante de ese tratado, tiene la responsabilidad de velar por que se cumpla”, advierte Ali Abunimah.
Posibles soluciones: ¿uno o dos Estado?
De acuerdo con el comunicador, Israel contraviene la IV Convención de Ginebra al confiscar territorios palestinos y construir asentamientos con pobladores israelíes en esa zona. Con esa línea política, Israel desbarató toda oportunidad de una solución que implique dos Estados independientes, afirma Abunimah, que en 2006 publicó una obra en la que se manifiesta a favor de la llamada “Solución de un estado”, es decir, de un único Estado israelí-palestino entre el Mediterráneo y el Jordán. Ese Estado, que, de hecho, ya existe, debería otorgar a sus ciudadanos los mismos derechos y exigir de ellos las mismas obligaciones, propone el periodista.
Autora: Bettina Marx/ Cristina Papaleo
Editora: Emilia Rojas-Sasse