Eurocámara aprueba reintroducción temporal de controles fronterizos
12 de junio de 2013Los países miembros del espacio Schengen podrán cerrar sus fronteras en casos de emergencia hasta incluso durante dos años, según una reforma aprobada por el Parlamento Europeo en Estrasburgo. El texto de la reforma, que entra en vigor a finales de 2014, establece que será posible hacer controles si llega una cantidad masiva de inmigrantes a las fronteras. Hasta ahora solamente existían dos casos excepcionales en los que era posile limitar la libertad de circulación de personas dentro del espacio Schengen de 26 países: grandes eventos masivos como partidos de fútbol y conferencias o casos de emergencia, como un ataque terrorista.
La comisaria de Interior de la UE, Cecilia Malmström, subrayó el papel que tendrá la Comisión Europea y que impedirá que se abuse de la norma. Además será posible hacer inspecciones no anunciadas para evitar controles ilegales por parte de los gobiernos. "Junto con expertos, la Comisión garantizará que se respeten las normas de Schengen", aseguró."Se impedirá a los gobiernos establecer controles innecesarios en las fronteras internas", añadió.
El detonante de los cambios fue la Primavera Árabe en 2011, cuando miles de refugiados llegaron a Italia desde el norte de África y se trasladaron luego a Francia. París cerró la frontera y se produjo un conflicto diplomático. También se alegó como motivo para la reforma los problemas de Grecia para vigilar su frontera con Turquía.
Como condición para que se reanuden los controles debe haber un problema en la frontera externa a la UE. Siempre que ésta no pueda ser protegida correctamente o a largo plazo por un determinado país, y siempre y cuando a causa de ello se vea "amenazada de forma masiva" la seguridad interna de otras naciones.
En el caso de Grecia, el país no podía vigilar bien su frontera con Turquía, un país externo a la UE. Por ello, inmigrantes procedentes de Asia o África podían entrar y luego trasladarse a otros Estados.
La Comisión fracasó sin embargo en su intención de tener la última palabra a la hora de decidir la reintroducción de los controles, ya que los gobiernos se opusieron. Sin embargo, para que un país cierre la frontera tiene que haber una recomendación al respecto de todo el resto de miembros de la unión. La decisión fue criticada por el grupo de los Verdes en el Parlamento, porque cada país podrá decidir lo que es "una emergencia". Las decisiones que afectan a la libertad de movimiento, el corazón del proyecto integrador europeo, deberían tomarse en conjunto a nivel europeo", consideró la eurodiputada alemana Ska Keller (dpa).