Grecia: la crisis de identidad de la izquierda
19 de junio de 2023Nada va bien para la izquierda en Grecia. En las elecciones parlamentarias del 21 de mayo de 2023, los resultados de los partidos de izquierda estuvieron lejos de lo que esperaban, tras cuatro años de liderazgo conservador de derecha bajo Kyriakos Mitsotakis, líder del partido Nueva Democracia, quien a pesar de numerosos escándalos, mejoró su resultado en alrededor de un punto y rompió la marca del 40 por ciento.
El líder opositor, Alexis Tsipras,y su partido Syriza, cayeron del 30 al 20 por ciento en comparación con 2019. Su excompañero de partido y actual adversario Yanis Varoufakis, con nueve escaños en el Parlamento griego desde 2019, no logró con su partido Mera25 el tres por ciento en la primera ronda.
La estudiante de arqueología de 19 años Maria Dariotaki está decepcionada con este resultado. En un puesto de campaña electoral de Mera25 en Atenas espera convencer a los jóvenes para que vayan a las urnas y emitan sus votos en la segunda vuelta.
Para María está claro que su decisión en ese momento de respaldar los programas de austeridad de Tsipras le costó al país la oportunidad de un nuevo comienzo de la izquierda.
Ninguna alianza de izquierda
Para muchos votantes de izquierda en Grecia, el referéndum del 5 de julio de 2015 fue y sigue siendo un shock. Este llevó a una ruptura dentro de Syriza. Políticos destacados, incluido el entonces ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, renunciaron al partido. Todos los intentos de salvar la alianza de izquierda fracasaron. En agosto de 2015, Tsipras dimitió como primer ministro y se celebraron nuevas elecciones. Syriza volvió a ganar y Tsipras fue primer ministro hasta julio de 2019.
Tsipras sigue apostando por una alianza de izquierda en esta campaña electoral, pero hay varios obstáculos. El antiguo Partido Popular no tiene buena reputación en Grecia. Muchos lo asocian con la corrupción y el nepotismo de los años 80.
Varoufakis, alternativa de izquierda a Tsipras con Mera25, también rechazó claramente una alianza con Syriza. Solo el KKE, el Partido Comunista Griego, sería un posible aliado para Tsipras. Sin embargo, este descarta coaliciones y formación de gobiernos mientras Grecia no se comprometa oficialmente con el socialismo.
Jóvenes votantes, en trabajos temporales
Los resultados de las elecciones del 21 de mayo de 2023 muestran que el apoyo a los partidos de izquierda entre los jóvenes es relativamente alto: el 28 por ciento de los votantes de entre 17 y 24 años votó a a Syriza, que solo obtuvo el 20 por ciento en general.
Pero muchos de ellos trabajaban de temporeros, como Giannis Zisis, de 22 años, quien vive, estudia y trabaja en Tesalónica. Muchos jóvenes están registrados con sus padres y tendrían que ir a casa a votar. El voto por correo no existe en Grecia.
Zisis no pudo votar el 21 de mayo ni tampoco lo hará el 25 de junio. Su empleador no le dio permiso. Él hubiera votado a Syriza o Mera25, aunque está decepcionado con Tsipras.
Gobierno fuerte, oposición débil
El politólogo ateniense Dimitris Christopoulos ve el futuro politico de Alexis Tsipras extremadamente débil. Era mejor primer ministro que líder de la oposición: "Lo que vimos el 21 de mayo fue solo el síntoma de una crisis más larga que ha durado ocho años". Tras los difíciles años como primer ministro, Tsipras perdió el rumbo: "Pensó que su supervivencia política era más probable cuanto más cerca estuviera de posiciones conservadoras". Esto ha significado que la izquierda tradicionalmente fuerte en Grecia ya no se sienta representada.
Pero la crisis de la izquierda también afectaría la función de la oposición como parte esencial del sistema democrático, advierte Christopoulos. Mientras los partidos de izquierda se pierden en conflictos personales, el fuerte gobierno de la conservadora Nueva Democracia es capaz de dirigir el destino del país casi sin control. Por eso recomienda cautela: "Quizás nos dirigimos hacia un nuevo tipo de sistema en el que la derecha gobernará durante un largo período de tiempo y conducirá al país hacia un sistema autoritario, casi iliberal".
"Grecia seguiría así el ejemplo de los países de Europa central e Italia. Este es un escenario muy probable", opina Christopoulos.
(rmr/ers)