"Habi, la extranjera"
12 de febrero de 2013“Estoy muy agradecida por estar acá, estoy en la casa del cine”, dijo emocionada María Florencia Álvarez ante periodistas al terminar la proyección para la prensa y la crítica internacional. La cinta echa una mirada fresca y sin prejuicios, aunque centrada en el exotismo, sobre el mundo musulmán en Buenos Aires.
Analía es una joven de provincia reservada y curiosa que llega por error a un velorio musulmán en Buenos Aires, donde recibe pertenencias de la difunta, entre ellos un mapa del Medio Oriente, un hiyab y una túnica. Los objetos se convierten para la joven en símbolos de una cultura para ella desconocida, pero fascinante, que la llevan a sumergirse poco a poco en el mundo de la comunidad islámica de la capital argentina.
Habiba Rafat
En su deambular diario por ese microcosmos se encuentra con un letrero donde aparece la fotografía de una niña bajo el nombre “Habiba Rafat”, que es adoptado por la joven para hacerse pasar por musulmana. Consigue trabajo en un supermercado árabe y toma clases con su nueva amiga, Yasmín, quien la ayuda a integrarse a la comunidad.
“Esta historia surge cuando yo tenía 22 años y me preguntaba qué es la identidad y cómo sería el mundo si desaprendiera lo aprendido”, dijo la cineasta, que añadió que el mundo del islam es algo exótico y desconocido en Buenos Aires. “No se ven personas vestidas así en la calle”, dijo.
La actriz Martina Juncadella, que asumió el papel de Analía, dijo sentirse muy identificada con el personaje. “Tengo 20 años y asumo que me encuentro en un momento muy parecido al del personaje. En un mundo en donde hay tanta minifalda y push up, me pareció interesante que el personaje se pusiera el hiyab para descubrir su femineidad”, dijo.
Una femineidad diferente
Se ve a Analía viéndose al espejo enfundada en una hermosa túnica que la hace sentirse diferente. En su ir y venir entregando cajas de víveres del supermercado, conoce a Hassan (Martín Slipak) joven de origen libanés que se prenda de ella. Cuando la joven le revela su nombre “Habiba Rafat”, Hassan se queda petrificado. Quedan de verse y él quiere enseñarle unas fotos. El joven cree que Analía es su hermana perdida tras un accidente en el que murió el padre de ambos.
La actriz Lucía Alfonsín, que interpreta en Jazmín a una joven árabe, recibió un elogio de la comunidad musulmana de Buenos Aires por su veracidad en el papel, según la directora. “Descubrí un mundo muy enriquecedor, muy profundo. Soy espiritual y disfruté mucho los días que pasé en la mezquita aunque no me convertiría al islam”, dijo la actriz.
La cineasta, que aspira con su película al premio al mejor primer largometraje de ficción que otorga la Berlinale, dotado de 50.000 euros, defendió a las mujeres musulmanas en Buenos Aires, diciendo que son libres de elegir si usan velo o no, así como de tener la libertad ante otro tipo de elecciones. “Suceden cosas aberrantes en nombre del islam, pero eso también sucede en otras culturas. Trabajar de top-less no aporta mucha dignidad a la mujer”, concluyó.
Autora: Eva Usi
Editor: Pablo Kummetz