Francia tiene un nuevo presidente
6 de mayo de 2012Cuando tienen lugar comicios presidenciales en Francia, las leyes prohíben que los medios locales hagan públicos sus sondeos a boca de urna antes de las ocho de la noche, hora en que los centros electorales cierran sus puertas. No obstante, este domingo (6.5.2012), el resto de la prensa europea dio a François Hollande como ganador de la contienda política poco después de las siete; así de claro estuvo su triunfo. De acuerdo a las primeras estimaciones no oficiales, el socialista consiguió más del 50 por ciento de los votos.
En su primera alocución como presidente electo de Francia, el socialista François Hollande, instó a los franceses a la unidad tras imponerse hoy en la segunda ronda de las elecciones. "Los franceses votaron por el cambio al ponerme al frente de la república", dijo por la noche en Tulle. "Estoy feliz de haberles transmitido esperanza. El cambio que les prometí (...) comienza ahora".
La victoria de Hollande lo convierte en el primer presidente de izquierda en Francia en diecisiete años. El sueño del conservador Nicolas Sarkozy de verse reelegido como jefe de Estado se vio frustrado en unas votaciones con una alta participación: según el instituto de encuestas Ifop, alrededor del 81,5 por ciento de los electores registrados ejerció su derecho al sufragio este 6 de mayo. Esa cifra está por debajo del 83,8 por ciento de participación alcanzado en los comicios presidenciales de 2007, pero sigue siendo inusualmente alta.
En una entrevista publicada este 6 de mayo por el diario alemán Frankfurter Allgemeinen Sonntagszeitung, el jefe de los socialdemócratas germanos, Sigmar Gabriel, preguntaba en voz alta si el Berlín regido por la canciller Angela Merkel estaría en capacidad de negociar un “pacto de crecimiento económico” con el París gobernado por Hollande. Los expertos temen que los mandatarios de ambas naciones tardarán mucho en acostumbrarse a lidiar el uno con el otro. Ellos nunca se han encontrado de frente; eso cambiará en el curso de este mismo mes.
Tras la dulce hora de las ovaciones…
Después de asumir el cargo de presidente –en una ceremonia que está pautada para el 15 de mayo, pero que podría adelantarse–, Hollande deberá prepararse para enfrentar compromisos y desafíos serios. El 18 y 19 de mayo viajará a Estados Unidos para asistir a la cumbre del Grupo de los Ocho, a celebrarse en Camp David. El 20 y el 21 de mayo participará en la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Chicago para anunciar la retirada anticipada de las tropas galas estacionadas en Afganistán.
En casa lo esperan una posible reunión informal de la Unión Europea –en donde los presentes querrán conocer su posición de cara a temas como el pacto fiscal– y la primera ronda de las elecciones legislativas, fijadas para el 10 de junio. Una semana más tarde se celebrará la segunda vuelta y sabrá a ciencia cierta quiénes son sus opositores en la Asamblea Nacional. Muchos dan por sentado que el fracaso de Sarkozy propiciará una alianza a escala parlamentaria entre el bloque conservador y el Frente Nacional de la líder de ultraderecha Marine Le Pen.
El 18 de junio, Hollande deberá viajar a la localidad mexicana de Los Cabos para participar en un encuentro del Grupo de los Veinte y, diez días después, tendrá la oportunidad de poner a prueba su poder de convicción en el ámbito comunitario: el 28 y 29 de junio, el nuevo presidente de Francia asistirá a la Cumbre de la Unión Europea dedicada al crecimiento económico. Ese es precisamente uno de los temas sobre los que se basó su campaña electoral y la cita de Bruselas es ideal para presentar propuestas que complementen la tendencia dominante al ahorro estatal.
Autor: Evan Romero-Castillo
Editor: José Ospina Valencia