Humala remodela su gobierno

Juan Jiménez, abogado de 48 años que se desempeñaba como ministro de Justicia, asumió la presidencia del Consejo de Ministros del Perú en reemplazo de Óscar Valdés, maniobra con la que, según los primeros análisis, el presidente Ollanta Humala busca reacercarse al centro y generar condiciones de diálogo.

Jiménez, viceministro de Justicia en el gobierno interino de Valentín Paniagua (2000-2001) y dedicado casi toda su vida a la actividad académica, llegó a la jefatura del gabinete con cinco nuevos ministros, mientras que los 11 restantes fueron ratificados.

La salida de Valdés se daba como un hecho desde hacía varias semanas, pues, según diversos análisis, su imagen de intransigente era un obstáculo en medio de la convulsión social, la forma en que se produjo provocó sorpresa.

Valdés anunció su alejamiento a través de Twitter y apenas instantes después comenzó la ceremonia de posesión. En el Perú el cambio de un jefe de gabinete incluye al equipo completo, pero el nuevo "premier", como se le conoce popularmente, puede ratificar a los miembros que considere.

Los primeros jefes de gabinete en los últimos gobiernos suelen durar al menos dos años, pero en el caso de Humala la velocidad de cambio ha sido récord. El primero fue Salomón Lerner Ghitis, pero se le relevó en diciembre, según se estimó entonces para dar un giro a la derecha.

Pero Valdés perdió rápido su crédito y de ahí la nueva apuesta. Así, Humala iniciará el sábado su segundo año de gestión con nuevos aires.

El reto: calmar las protestas

El reto de Jiménez será calmar la serie de protestas populares, la mayoría relacionadas con la minería, y frenar el creciente desencanto popular con Humala, medible en diversas encuestas.

La ocasión fue aprovechada por Humala y Jiménez para sacar del Ministerio de Interior al general del Ejército en retiro Wilver Calle, cuestionado por firmar en su momento un acta de sujeción al entonces controvertido asesor presidencial Vladimiro Montesinos, y del de Defensa al parlamentario José Urquizo, señalado por falsificar supuestamente datos de su pasado académico.

Calle le dejará el cargo a Wilfredo Pedraza, un ex presidente del Instituto Nacional Penitenciario al que se percibe como progresista, y Urquizo al ex parlamentario Pedro Cateriano, un conocido abogado liberal que entre otras cosas defiende al Estado peruano en la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

También dejaron sus puestos los ministros de Agricultura, Luis Ginocchio, y de Salud, Alberto Tejada, reemplazados por Milton Von Hesse y Midori de Habish, respectivamente, ambos reconocidos como tecnócratas. El puesto que deja vacante Jiménez será llenado por su viceministra, Eda Rivas.

Analistas de centro como Fernando Tuesta y derecha como Fernando Rospigliosi coincidieron en que el nombramiento de Jiménez puede ser prometedor en la retoma del diálogo. El flamante presidente del Consejo de Ministros solía ser mencionado en las especulaciones, pero al lado de los titulares de Vivienda, René Cornejo, y de Ambiente, Manuel Pulgar Vidal.

Fuente: DPA

Editor: Enrique López