Incendio deja 233 muertos en discoteca brasileña
27 de enero de 2013La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, llegó a Santa María, en el sur del país, para acompañar a las familias de las víctimas del incendio ocurrido en una discoteca en esa ciudad, que dejó un saldo parcial de por lo menos 233 muertos y 116 heridos. Previamente se había hablado de 245 muertos y 48 heridos.
Rousseff llegó a su país proveniente de Santiago de Chile, donde participaba de la Cumbre Celac-UE. Tras ser informada de la tragedia, la mandataria resolvió interrumpir su participación en la cita y cancelar las reuniones bilaterales que tenía previsto celebrar este domingo con autoridades de Argentina, Letonia y Bolivia, para viajar en forma inmediata a Brasil.
Rousseff se dirigió en primer lugar al Hospital de la Caridad, donde se encuentran algunos de los heridos, para después trasladarse al Centro Deportivo Municipal de la ciudad, en el que se improvisó un espacio para llevar a cabo la identificación de los cadáveres. En las inmediaciones del lugar, una multitud de familiares y amigos de las víctimas se aglomeraban a la espera de poder ingresar al centro deportivo para reconocer los cuerpos.
Intoxicación por humo
Según el comandante del Batallón de Operaciones Especiales de la Policía Militarizada, mayor Cleberson Bastianello, el 90 por ciento de las víctimas perecieron intoxicadas por el humo. La mayor parte de ellas son jóvenes que participaban de una fiesta universitaria en la discoteca "Kiss", una de las más populares de la ciudad.
Por su parte, el coordinador de Defensa Civil, Adelar Vargas, indicó que el fuego se habría iniciado cuando uno de los integrantes del grupo musical que animaba la fiesta encendió una luz de bengala. Una de las chispas habría alcanzado el yeso que cubría el techo como aislante acústico, provocando la rápida expansión de las llamas.
Investigan denuncias
El local, con capacidad para 2.000 personas, contaba con una única puerta de salida -la misma que se usa para entrar- y estaba repleto en el momento en que ocurrió el incendio.
Según testigos, los guardias de seguridad impidieron durante varios minutos la salida de la gente, porque creyeron que se trataba de una riña e intentaron impedir que el público aprovechara el supuesto tumulto para irse sin pagar. El Ministerio Público está investigando las denuncias.
Fuente: dpa
Editora: Emilia Rojas