Independencia de Kosovo: ¿inicio de era independentista en Europa?
17 de febrero de 2008El Parlamento de la ahora ex provincia serbia, habitada por un 95 por ciento de albaneses, aprobó la declaración de independencia propuesta por el gobierno del primer ministro Hashim Thaci.
Es de esperarse que Occidente, a su cabeza Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania, Francia e Italia reconozcan en breve a Kosovo, y que les seguirá la mayoría de los miembros de la UE, excepto posiblemente Chipre, Grecia, Rumania, Bulgaria, Eslovaquia y España.
Aún cuando se ha repetido hasta el cansancio que "Kosovo es un caso aislado y no se puede comparar con otras regiones de Europa", no se ha logrado disipar la sospecha de que la independencia de la provincia serbia dará nuevos impulsos a los movimientos separatistas existentes en diversos lugares del Viejo Continente.
De hecho a pocas horas de que Kosovo declarara su independencia de Serbia, los respectivos presidentes de Abjasia y Osetia del Sur, regiones separatistas de Georgia, anunciaron que adoptarán medidas para seguir el ejemplo de la ya ex provincia serbia.
"Abjasia se dirigirá a Rusia, el Consejo de Seguridad de la ONU y la Comunidad de Estados Independientes (CEI) con el pedido de reconocimiento de su independencia", anunció el presidente abjasio, Serguei Bagapch, citado por la agencia Interfax.
"Osetia del Sur y Abjasia tienen mejores fundamentos políticos y legales para su reconocimiento que Kosovo", señaló por su parte el presidente de Osetia del Sur, Eduard Kokoity, que se mostró convencido de que ambas regiones proclamarán su independencia en el corto plazo.
¿Principio de una ola independentista?
Hasta ahora se actuaba afirmando que la invulnerabilidad de las fronteras era uno de los pilares de la estabilidad. En el caso de Kosovo, la UE decidió que este principio no tenía vigencia, y dio paso a lo que puede convertirse en un precedente para otras regiones.
¿Se les puede negar a los turcos de Chipre, a los vascos, a los serbobosnios o a los escoceses lo que sí se les permitió a los kosovares?
Algunos especialistas sostienen que Kosovo es tan sólo el principio. Rusia también advirtió que estas decisiones políticas podrían causar un efecto dominó, por ejemplo, en la zona del Cáucaso y del Mar Negro.
En Europa hay numerosos movimientos que luchan por la independencia de determinadas regiones o por establecer nuevos límites.
Ante todo en los Balcanes, la independencia de Kosovo genera nuevas tensiones. Estos acontecimientos podrían reforzar la demanda de los serbios en Bosnia y en el norte de Kosovo, que quieren ser anexados a Serbia. En Macedonia, la población albanesa podría exigir pasar a formar parte de Kosovo, con lo cual harían peligrar la existencia del país.
El temor a que se produzca un efecto dominó en los Balcanes fue lo que llevó a algunos países miembro de la UE como Grecia y Rumania a rechazar la independencia de Kosovo. Chipre, por su parte, también teme que Kosovo haga escuela en el norte de la isla, ocupada por tropas turcas.
Incluso Eslovaquia, que surgió de la división de Checoslovaquia, se declaró en contra de la separación de Kosovo de Serbia. "No rechazamos la idea de un Kosovo independiente, pero queremos que haya un acuerdo al respecto", afirmó un diplomático eslovaco.
¿País Vasco, Cataluña y Galicia inspiradas por Kosovo?
España considera que la independencia de Kosovo viola el derecho internacional y teme que por ello los grupos separatistas del País Vasco, Cataluña y Galicia se sientan confirmados en su lucha.
"Una declaración unilateral de la independencia jamás ha conducido a algo positivo", dijo el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos. El periódico español "El Mundo" pidió que España hiciera uso de su derecho a veto para evitar que la UE reconociera a Kosovo como Estado.
Francia se ve ante los movimientos secesionistas de Córcega y del País Vasco. Y las minorías existentes en Bretaña, en Alsacia y en la parte francesa de Cataluña también se hacen oír.
Hace tiempo que París se había opuesto al desmembramiento de Yugoslavia y, finalmente, también a la independencia de Kosovo, pero tras el fracaso de las negociaciones pertinentes, el presidente Nicolas Sarkozy se manifestó a favor de una independencia que tuviera lugar como una "transición ordenada".
En Bélgica existen grupos flamencos que abogan por la fundación de un Estado propio, con lo cual hacen peligrar el Reino.
En Gran Bretaña, los escoceses reclaman una mayor autonomía. En mayo de 2007, el Partido Nacionalista Escocés (SNP) fue elegido gobierno y tiene intenciones de llamar a un referéndum sobre la independencia.
Alex Salmond, líder del SNP, opina que una Escocia independiente, dados sus yacimientos de petróleo, podría convertirse en el tercer país más rico de la UE.