ISM: El mundo de los dulces llega a Colonia
31 de enero de 2011
Al igual que en los últimos 41 años, el sector confitero global tiene una cita entre el 30 de enero y el 2 de febrero de 2011 en Colonia, en la Internationale Süßwarenmesse, la feria internacional de los dulces. Este año, 1.494 compañías provenientes de 64 países participan con sus nuevas aportaciones en el mundo de los chocolates, galletas, caramelos y aperitivos.
Un sector en el que cada día prima más la originalidad, los nuevos sabores y la preocupación por la salud. Estas características son las más sobresalientes en las vitrinas de los nuevos productos con los que las principales marcas internacionales quieren sorprender a sus audiencias este año: chocolates con más leche y menos azúcar, frutos secos confitados con sabores exóticos hasta ahora no utilizados, platos de sushi hechos de chocolate acompañados de palillos también comestibles, bombones de café en forma de tazas de café, dulces con un toque de hierbas relajantes o jelly beans energéticas para deportistas. Un panorama de triple “d”: diverso, divertido y delicioso.
Por supuesto, tampoco podían faltar los eventos en directo para los visitantes y curiosos: maestros chocolateros alemanes se encargan cada día de convertir la preparación de bombones en un espectáculo. En el evento llamado ISM Chocolate Master, todos los interesados pueden aprender nuevas recetas para realizar chocolate con los sabores más rompedores: albahaca, tomate, mostaza, olivas... Ingredientes que automáticamente arrancan exclamaciones de extrañeza de la audiencia que cada día se reúne enfrente de la pequeña cocina improvisada que sirve de escenario en la feria. Hasta que los resultados hablan por sí solos.
Latinoamérica en ISM
Entre los 64 países participantes en la feria de este año, la presencia latinoamericana ha sido notable. Aunque algunos stands como el de Argentina ha sido más pequeño que otros años, el de México y, especialmente, en de Brasil, han crecido exponencialmente. A pesar de ello, la crisis se sigue notando, según el director de la división internacional de la empresa chilena de dulces Carozzi, Christian Koplow: “La feria en general se ha ido reduciendo un poco. La cantidad de empresas presentes es un poco menor al año pasado; nosotros lo achacamos al impacto de la crisis económica global”.
Carozzi es una empresa veterana en la ISM, y en su oferta entra el espectro entero del mundo de la confitería: chocolates, caramelos, galletas y pastas. “Somos la tercera empresa latinoamericana mundial en el sector de los caramelos y los confites”, afirma Koplow. Expertos en la demanda infantil de caramelos y gomitas o gominolas, con mucho color y de dudosos beneficios para la salud, Carozzi se adelanta a los tiempos con su línea de productos “Vivo”, una especie de “bio-dulces” en los que se quiere conseguir el mismo sabor y alegre colorido, pero con ingredientes más naturales y saludables. “Imagínese unas gomitas que tengan vitaminas y fruta de verdad. Dulces sin azúcar. Son productos necesarios para un mercado, el estadounidense, por ejemplo, en el que se está limitando la comercialización de confites porque el 50% de los niños son obesos. Hay un consumo indiscriminado de azúcar al que se está poniendo restricciones.”
Con sus vistas puestas claramente en el mercado latino- y norteamericano, Koplow admite que en otros sectores, como principalmente el del chocolate, resulta difícil ser competitivo en Europa. “Los europeos marcan la pauta en las tendencias del chocolate”, afirma, no obstante, Kopow, y siguiendo esa pauta, la empresa ha sacado una nueva línea de tabletas con más contenido de cacao: chocolate más negro, más amargo, con más sabor.
Europa, destino difícil
La poca competitividad en el mercado europeo es una opinión compartida por otra gran compañía de dulces lationamericana: la mexicana Montes, especializada en chocolates, dulce de leche y frutos secos confitados y enchocolatados, y conocida por sus caramelos de leche con cacahuete “Damy”. Centrados en el mercado nacional y latinoamericano, y con exportaciones a Australia, Nueva Zelanda, Corea y Rusia, los intentos previos de traer sus productos a Europa no han tenido el éxito deseado, tal y como cuenta su representante de venta internacional Ana Guillermina González: “En Europa resulta difícil. Durante un tiempo estuvimos exportando almendras y cacahuetes enchocolatados, pero tuvimos que salir del mercado por los precios. México no tiene un subsidio para la exportación del cacao o del azúcar, como lo tiene, por ejemplo, Brasil, Colombia o Argentina. Por ello no somos competitivos en este mercado”.
El mercado europeo cuenta con algunas de las mayores compañías chocolateras del mundo, y a pesar de la dura competencia que impide la entrada de los productos de muchas de estas compañías, hay un sector del mercado latinoamericano que sigue siendo esencial en este proceso: el de la exportación de cacao. El stand de Ecuador se especializa en este nicho. Los representantes de la compañía Transmar Commodity Group of Ecuador S. A. llevan viniendo a la ISM tan sólo dos años, pero ya han podido comprobar que merece la pena. “A todo el mundo le interesa esta feria, todas las grandes compañías chocolateras están aquí”, explica Julio Moscoso, supervisor comercial. “Un stand como el nuestro, de materia prima, no llama tanto la atención como otros de chocolates coloridos y dulces, pero nuestro público es diferente. Venir a la ISM siempre es beneficioso.” Sus mercados más grandes son América, Japón y Europa, donde Transmar es la primera empresa del mundo exportadora del cacao “fino de aroma”, una variedad de sabor y aroma más fuerte que el regular, ideal para chocolates más puros: una tendencia que lleva imponiéndose en los últimos 5 años, corroborada por Carozzi. “El aroma y el sabor del cacao ecuatoriano es inigualable. Por eso es también un poco más alto de precio. Tiene la mayor producción de cacao “fino de aroma”, y la gente se pelea por este cacao”, sonríe Moscoso.
La ISM es sin duda un buen punto de encuentro para exportadores de cacao y maestros chocolateros. Un año más, el aroma del buen chocolate inunda los pabellones de la Koelnmesse. La tentación es irresistible.
Autora: Lydia Aranda Barandiain
Editor: Enrique López