Israel recuerda el Holocausto para preservar memoria
4 de mayo de 2016Cada año y durante su propia celebración del Día Recuerdo del Holocausto (el calendario hebreo lo marca una semana antes del día de su independencia, motivo por el que no coincide con la jornada internacional), el pueblo judío recupera un nefasto episodio de sus vidas para que el ser humano no repita el capítulo más gris de la historia moderna.
Relatos como el de Sarah Guttman resuenan hoy siete décadas después para hacer memoria. Alemana de nacimiento, con apenas dos años y medio sus padres la entregaron a una familia belga para que pudiera salir del país bajo el régimen nazi, aunque meses después se reencontró con su familia biológica para comenzar el periplo de una vida convertida en huida. A Alemania y Bélgica le siguieron Francia, España y Portugal - "mi padre no dejaba de buscar la manera de salir de un continente en llamas"- y Cuba, cuenta con garra Guttman en un encuentro con periodistas.
Tras la Segunda Guerra Mundial y con el fin del Holocausto, Sarah y su familia pasaron por EE.UU. y llegaron al final a Israel, el país donde viven hoy cerca de 189.000 ancianos supervivientes. Cada año seis de estos supervivientes encienden seis antorchas para recordar a los seis millones de judíos que murieron en el genocidio y que esta noche iluminarán el memorial del Yad Vashem (Memorial del Holocausto, en hebreo), en Jerusalén, como parte de un extenso programa.
Chaim Grosbein, de 79 años, encenderá una de estas antorchas en una ceremonia en la que participarán el presidente de Israel, Reuvén Rivlin y el primer ministro, Benjamin Netanyahu, entre otras personalidades. Este portador de la quinta antorcha sobrevivió a los nazis porque, cuando estos descubrieron a su familia refugiada en un pozo excavado debajo de un horno en Polonia, Chaim y su prima se escondieron en un rincón y no fueron descubiertos.
Zikaron Basalon, una iniciativa para aprender de la historia
Para que este tipo de testimonios no caigan en el olvido, supervivientes como Guttman decidieron compartir la historia de sus vidas a través de iniciativas como Zikaron Basalon para acercar a las nuevas generaciones los relatos de los cada vez menos supervivientes.
El fundador de esta iniciativa, Nadav Embon, de 31 años, dice "percibir una desconexión de los jóvenes respecto a la celebración del Día del Holocausto", motivo que le llevó desde 2011 a reunir en una casa a un grupo de personas con un superviviente, quien cuenta su historia en un ambiente íntimo y en el que todos participan activamente. Hoy este proyecto pone en común a miles de participantes alrededor del mundo y el Holocausto es contado en primera persona en una sala de estar de Nueva York, Brasil, Australia o India, entre otros, con el único fin de "hacer memoria", apunta Embon en un encuentro con periodistas.
JOV (efe, israelheute)