Italia: líderes parlamentarios de centroizquierda
16 de marzo de 2013Piero Grasso, de la coalición de centroizquierda, estará al frente del Senado italiano, tras imponerse al candidato del centroderecha, Renato Schiffani por 137 votos contra los 117, agrega la fuente.
La elección del presidente del Senado se preveía dura ya que ninguna coalición posee escaños suficientes en la cámara para poner directamente a su propio candidato. El exfiscal había anunciado a fines de 2012 que iba a dejar su cargo para presentarse a las elecciones de febrero por el Partido Democrático.
El abogado de 68 años era desde 2005 una de las figuras más importantes en Italia en la lucha contra la mafia, por lo que también obtuvo un amplio reconocimiento internacional. El líder de la coalición de centro-izquierda, Pier Luigi Bersani, había propuesto a Grasso, cuyo triunfo dependió también del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), de Beppe Grillo, que no había llegado a un acuerdo sobre si votar en blanco o apoyar a Grasso y dejó la libertad de opción a sus senadores. Schifani tenía el apoyo de la coalición de centro-derecha del ex primer ministro Silvio Berlusconi.
¿Camino despejado?
Previamente, Laura Boldrini, miembro del partido Izquierda, Ecología y Libertad (SEL), fue elegida presidenta del Congreso italiano de los Diputados. Boldrini recibió el apoyo del Partido Democrático (PD), la principal facción en la alianza de centro izquierda que ganó por un escaso margen las elecciones del 24 y 25 de febrero.
Con estas elecciones se despeja un poco más el camino para la formación de gobierno en Italia. El presidente italiano, Giorgio Napolitano, anunció que iniciará el miércoles la ronda de conversaciones para formar un gobierno de coalición, e instó a los políticos a esforzarse en llegar a acuerdos para desbloquear la situación.
Se espera que Napolitano encargue la formación de gobierno a Bersani, cuya coalición logró el mayor número de votos. Grillo, tercero en las elecciones, rechaza pactar con Bersani y quiere un "gobierno sin partidos". Por su parte, el líder de la coalición de centro-izquierda se niega a formar una gran alianza con Berlusconi.
Si Bersani fracasa en el intento, no se descarta la convocatoria de nuevas elecciones, aunque también podría formarse un gobierno tecnócrata que saque adelante las reformas.
rml (dpa, lusa, afp)