James Dean, a 60 años de su muerte
Es uno de los más grande ídolos del cine hasta hoy. Solo tuvo tres roles protagónicos en Hollywood, pero su aura ha perdurado en el tiempo. DW les ofrece una retrospectiva.
Informal, simpático y muy bien parecido
Todo esto fue James Dean. Y así se le recuerda. A ello han contribuido cientos de fotos como esta, tomada durante la grabación de su película "Gigante".
Golpe del destino a los nueve años
James Dean creció en el estado norteamericano de Indiana, donde había nacido el 8 de febrero de 1931. Su madre murió de cáncer a los 29 años. El pequeño creció con su abuela y su tía.
Idilio bucólico
James Dean descubrió temprano su interés por la actuación, el arte y la danza. En el bucólico idilio provinciano estadounidense, en el que la familia vivió algunos años en esta casa de Fairmount, Indiana, James Dean participó en un grupo escolar de teatro, aprendió a bailar y experimentó con instrumentos musicales.
En el escenario y ante las cámaras
James Dean se involucró en su juventud en grupos privados de actuación, y así obtuvo sus primeros papeles secundarios sobre el escenario y en la televisión. Su primera aparición corta ante las cámaras de cine fue en una cinta de Sam Fuller "Fixed Bayonets!" (Bayoneta calada), de 1951.
Primer protagónico con Elia Kazan
Su primer protagónico en el cine lo llevó a la fama. El muy reconocido director de cine y teatro Elia Kazan confió en James Dean para su drama "East of Eden" (Al este del paraíso). Los productores y directivos de estudios presentaron a Dean como figura de culto desde el inicio.
"¿Por qué hacemos esto? Porque algo habrá que hacer"
Su segunda cita consolidó su éxito. En la ya clásica cinta de Nicholas Ray "Rebels Without a Cause" ("Rebeldes sin causa") Dean interpretó el rol de su vida: el de un joven fresco y rebelde.
Gigante del cine
Su último protagónico en "Gigante", de George Stevens, lo puso junto a Elisabeth Taylor y fue también su último rol. Antes del estreno sufrió un accidente, que contribuiría a cimentar el mito en torno al artista.
Loco por los automóviles
James Dean siempre estuvo fascinado por los autos veloces. Con el primer dinero que ganó como actor se compró un coche deportivo con el que participaba en carreras.
Adiós a los 23 años
El 30 de septiembre de 1955 sufrió un accidente fatal en un cruce en California. Primero se creyó que se había excedido en la velocidad. Más tarde se supo que no había tenido la culpa de la tragedia.
El mito
Directamente tras su muerte, James Dean se convirtió en figura de culto. En torno a muy pocos otros actores de Hollywood se han tejido tantas leyendas como en torno a este "rebelde sin causa", desaparecido tan prematuramente.