Cuando Jan Lisiecki toca el piano, suena como si estuviera al teclado un virtuoso con décadas de experiencia. Llena salas de concierto en todo el mundo, gana prestigiosos premios y es celebrado por la prensa internacional: "Impecable, lírico e inteligente", así lo definió el New York Times. ¿De dónde saca el joven pianista, nacido en 1995, la madurez de sus interpretaciones? ¿Qué lo hace tan especial, como persona y como músico? ¿Cuál es el secreto de su temprano éxito? Cultura.21 se encontró con Jan Lisiecki en un festival de música en la isla báltica de Usedom. Entre la playa y el escenario, habla de su amor por la música, de su inmensa carga de trabajo, de su infancia y de las personas que más lo apoyan; en especial, sus padres, que emigraron a Canadá desde Polonia unos años antes de que él naciera y lo acompañan en la mayoría de las giras de conciertos hasta el día de hoy. En la entrevista, también cuenta cómo en la música encontró un "espectro infinito de alegría, dolor y sufrimiento y todas las emociones humanas", quizá uno de los secretos de su sofisticada forma de tocar el piano.