Joyas de cuatro ruedas
5 de agosto de 2003Bien conocido es el viejo cliché del amor de los alemanes por su automóvil, en algunos casos la pasión es tan extrema que los propietarios dedican incluso más tiempo a su vehículo que a su mujer. Los coleccionistas de automóviles antiguos aumentan en número según los datos oficiales que publica la Oficina Federal de Registros. La entidad ha otorgado este año 220,000 permisos de circulación a automóviles de más de treinta años de antigüedad. Estos vehículos, que llevan una "H" como distintivo en la placa, gozan de prerrogativas fiscales. Los coleccionistas no se conforman con poseer un exótico vehículo, ahora muchos quieren mostrar sus tesoros, que por cierto se conservan mejor si se usan que si permanecen encerrados. Según la oficina de registros, un 20% de los propietarios de automóviles antiguos los usan en la vida cotidiana, esto es, un total de 101,000 vehículos circulan regularmente por las calles alemanas.
Coleccionables como inversión
En tiempos en que los inversionistas han perdido la confianza en las bolsas de valores, la inversión en la compra y mantenimiento de este tipo de automóviles ha adquirido un nuevo atractivo, pues bien cuidados, estos vehículos experimentan una apreciación de su valor. Quien haga una buena elección, incluso hasta puede ganar dinero con su "oldtimer". "Los automóviles decapotables, Bugattis, Ferraris, Porsche y otros exóticos del mundo automotriz representan un verdadero potencial", afirma el experto Frank Wilke, de la empresa de asesoría especializada Classic Data. Pero advierte: "Sólo vale la pena la inversión si el vehículo se usa en la vida cotidiana, pues de otro modo no tiene caso simplemente el conservar una de esas reliquias". Quien quiera alcanzar altos rendimientos tiene que apuntar hacia las ligas mayores, comprarse un famoso automóvil de carreras o algún modelo previo a la Segunda Guerra Mundial, cuyos precios superan los 100.000 euros.
Ferrari, liga mayor
Por un raro modelo los coleccionistas son capaces de pagar precios exhorbitantes; viejos modelos Mercedes, BMW y Porsche. Pero lo que despierta verdaderas pasiones son los clásicos deportivos italianos. Un flamante modelo Ferrari 330 RI/LM Testarrossa, construido en 1961 fue subastado en 6,4 millones de euros en el 2002, mientras que un Mercedes 540K descapotable (Cabriolet A) de 1937, obtuvo 1,1 millones de euros. Pero también los vehículos de volumen de producción relativamente alta pueden apreciarse en su valor. Así mejoró el valor de mercado de un Porsche 356 B convertible, cuya producción tuvo lugar entre 1960 y 1963. Según la empresa Classic Data, de un valor equivalente de 37.300 euros en 1995, ahora se cotiza en 41.300 euros. El precio de un Maserati 3500 GT –producido entre 1957 y 1964- aumentó de 3.600 a 35.000 euros. Hasta el legendario escarabajo de Volkswagen mantiene su valor. Un modelo 1303 LS convertible tuvo en 1995 un valor promedio de 10.200 euros en 1995 y ahora su valor de mercado es de 10.900 euros.