Juegos Paralímpicos: velocista transgénero en el debate
29 de agosto de 2024"A menudo digo que si yo lo he hecho, otros también pueden hacerlo. Espero ser la primera de muchas, un punto de referencia, una inspiración. Mi historia puede ayudar a muchas personas, ya sean invidentes, transgénero o no", declaró Valentina Petrillo a la agencia de prensa AFP.
Petrillo competirá en la prueba T12 para atletas con discapacidad visual. En 2017 se declaró transgénero públicamente, tras no haber entrado por poco en el equipo paralímpico de Atlanta de 1996 como hombre, pero las autoridades italianas no la reconocieron como mujer hasta 2023. Petrillo, de 50 años, ganó dos medallas de bronce en las pruebas de 200 y 400 metros en los Campeonatos del Mundo de Atletismo de 2023.
Aunque Petrillo dijo que espera ser "la primera de muchas" atletas transgénero que compitan en los Juegos, el Comité Paralímpico Internacional (CPI) indicó que no es la primera atleta paralímpica transgénero. Un portavoz de la organización dijo a DW que la primera fue la lanzadora de disco holandesa Ingrid van Kranen, en Río 2016.
Primera atleta trans en participar en los Juegos Paralímpicos
Van Kranen quedó novena en la final de lanzamiento de disco y no tuvo demasiado impacto a nivel internacional. En los ocho años transcurridos desde entonces, las cuestiones transgénero se han convertido en un tema de debate mucho más destacado.
Para la atleta paralímpica alemana Katrin Müller-Rottgardt, que correrá en la misma categoría que Petrillo, el escenario deportivo plantea dificultades que la vida normal no presenta. La deportista dijo al tabloide alemán Bild: "Ella (Petrillo) ha vivido y entrenado como hombre durante mucho tiempo, por lo que existe la posibilidad de que las exigencias físicas sean diferentes a las de alguien que nació mujer. Esto podría darle una ventaja".
La cuestión es que sobre este tema no hay consenso, diferentes deportes y organismos rectores adoptan líneas completamente diversas.
Imane Khelif atrapada en el medio
Esto quedó claro en el caso de la boxeadora ganadora de la medalla de oro olímpica en París, Imane Khelif. Después de que su oponente italiana se retirara de la competición contra Khelif, su género se convirtió en uno de los temas polémicos de los Juegos, fue etiquetada incorrectamente como transgénero por los medios de comunicación y las principales figuras públicas. Lin Yu-ting de Taiwán enfrentó desafíos similares.
Ambas fueron inicialmente excluidas del Campeonato Mundial de Boxeo en 2023, organizado por la Asociación Internacional de Boxeo. Posteriormente, dicha organización fue despojada de su condición de organismo rector mundial del deporte, lo que permitió que las boxeadoras participaran en París.
Las inconsistencias evidentes entre los deportes y los eventos significan que Petrillo no podría competir en atletismo femenino en los Juegos Olímpicos, pero sí en los Paralímpicos. La Asociación Mundial de Federaciones de Atletismo (IAAF) prohibió a los atletas transgénero competir en 2023. Sin embargo, el Comité Paralímpico Internacional (CPI), afirmó que cualquier persona que sea legalmente reconocida como mujer, es elegible para competir en la categoría para la que su discapacidad la califica. El CPI dijo a DW que, al menos por ahora, dejan esas decisiones en manos de las federaciones individuales.
Nombres de alto perfil en acusación
No hay duda de que Petrillo se halla dentro de la legalidad deportiva, pero es poco probable que eso evite que esté en el centro de una tormenta, como lo estuvo Khelif.
"Sé que habrá gente que no entienda por qué estoy haciendo esto, pero estoy aquí, he luchado durante años para llegar a donde estoy y no tengo miedo. Esto es lo que soy", dijo la atleta.
Si bien los Juegos Paralímpicos no gozan del mismo perfil global que los Juegos Olímpicos, es probable que los ojos del mundo estén puestos en Petrillo cuando salte a la pista el 3 de septiembre.
(rmr/ers)