Kiev anuncia la jornada con más bajas en su ejército
11 de julio de 2014Al menos 23 soldados ucranianos han muerto y 93 han resultado heridos en las últimas 24 horas en el este de Ucrania a manos de los separatistas prorrusos, informaron hoy las autoridades de este país.
Los milicianos prorrusos reconocieron la autoría del ataque que se produjo sobre las 04.00 de la madrugada (01.00 GMT) junto a la localidad de Zelenopólie, en la región de Lugansk, escenario de los más encarnizados combates desde la rendición de Sloviansk el pasado fin de semana. Los separatistas emplearon fuego de lanzaderas de misiles de bocas múltiples "Grad", que causó 19 bajas mortales, según el secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, Andréi Lisenko, quien redujo la primera cifra oficial proporcionada por Interior.
En una de las jornadas más trágicas para el Ejercito ucraniano desde el inicio de las acciones militares en el este sublevado del país hace tres meses, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, prometió encontrar y castigar a los responsables de la muerte de los soldados. "Por cada vida de nuestros militares, los guerrilleros pagarán con decenas y cientos de los suyos. Ni un solo terrorista escapará al castigo y recibirá lo merecido", aseveró Poroshenko.
‘Granizo' de fuego
Los sistemas móviles "Grad" (Granizo), una de las armas más efectivas para enfrentarse a tropas de infantería, cuentan con hasta 40 bocas instaladas sobre un camión y, con un alcance de 40 kilómetros, son capaces de barrer en una andanada completa una superficie de 15 hectáreas.
Aunque las autoridades ucranianas insisten en que la "operación antiterrorista" contra los sublevados acabará más pronto que tarde y llegará la paz, no pasa un día sin que se registren muertes no sólo entre soldados y milicianos, sino también entre ciudadanos pacíficos. Al menos ocho civiles han perdido la vida en las últimas 24 horas en las regiones de Donetsk y la vecina Lugansk, cuya capital homónima, de medio millón de habitantes, es sometida a diario al fuego de artillería. El líder separatista Alexander Borodai dijo ayer a la prensa que setenta mil residentes habían abandonado ya la ciudad de Donetsk.
Víctimas civiles
El Ministerio de Sanidad de Ucrania ha informado de que los tres meses de conflicto en el este del país se han cobrado la vida de 478 civiles, entre ellos 30 mujeres y siete niños. El Ejecutivo de Kiev informó hoy además de la muerte de otros al menos 50 milicianos en un ataque aéreo del Ejercito ucraniano junto la localidad de Izvárino, donde se encuentra uno de los principales puestos fronterizos entre Rusia y Ucrania.
Tras el ataque, las autoridades ucranianas anunciaron que habían recuperado el control de prácticamente toda la frontera, incluidos los tres puestos fronterizos (Izvárino, Chervonopartizansk y Dovzhanski) cuya pérdida lamentaba Poroshenko en la última cumbre de la Unión Europea celebrada en Bruselas en la última semana de junio.
Moscú pide la paz
Rusia volvió a plantear hoy al resto de miembros del Consejo de Seguridad de la ONU la aprobación de una resolución que exija el fin de la violencia en Ucrania, un paso hasta ahora bloqueado por las diferencias que las potencias occidentales mantienen con Moscú. En lugar de plantear un proyecto de resolución -algo que ya hizo sin éxito hace más de un mes-, la delegación rusa distribuyó hoy al resto de países un documento con varios puntos que considera prioritarios para tratar de negociar con base en ellos.
Entre otras cosas, Moscú quiere que el Consejo exija a todas las partes del conflicto el cese de la violencia, que exprese su preocupación por el aumento de la violencia contra los civiles en el este de Ucrania y que respalde las propuestas que están sobre la mesa para tratar de lograr una solución negociada a la crisis. "Hemos decidido usar este proceso más lento para tratar de conseguir unas bases comunes", explicó el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, en declaraciones a los periodistas.
LGC (EFE / Reuters)