Krautrock, la contribución alemana a la vanguardia pop de los años 60
22 de marzo de 2009En la década de 1960, cuando la música y las artes en general se lanzaban con inusitado ímpetu contra los dictámenes de la política internacional amenazando el status quo de las trincheras de los medios de comunicación, surgieron en Alemania los primeros indicios de que el país todavía era capaz de influenciar la música que escuchaban los jóvenes en el resto del mundo.
Aprovechando la fuerte tradición del campo científico y heredando el inconformismo estético de compositores como Karlheinz Stockhausen (1928-2007), bandas de diversas partes de Alemania entraron en escena, instigadas por la efervescencia de la contracultura, la mayoría de ellas experimentando con elementos del rock progresivo, género sintetizador que transformó el sonido. Así fue creada una curiosa vertiente, que acabó siendo bautizada como Krautrock.
Título británico
El término Krautrock fue inventado por el DJ inglés John Peel, cuando llegó a sus manos el álbum Psychedelic Underground (1969), de la banda Amon Düül, de Múnich. La música era “Mama Düül und Ihre Sauerkrautband spielt auf” (Mama Düül y su banda de col fermentada).
Como kraut era también la forma en la que los alemanes eran llamados por los ingleses en la Segunda Guerra Mundial, el término se acabó adoptando por los propios alemanes, aunque con un sentido peyorativo. Definitivamente, no era nada fácil hacer música en un país que todavía ansiaba una nueva identidad tras la aberración del nazismo que imperó desde 1933 hasta 1945.
Las bandas británicas Pink Floyd, Yes, Genesis y Gentle Giant, entre otras, eran las mayores referencias de aquellos jóvenes que vivían en el epicentro de la Guerra Fría. Alemania estaba infestada de misiles nucleares rusos y norteamericanos, Berlín era una ciudad dividida, y los horizontes de aquella generación cambiarían al son de la movilización de la ciudadanía.
El país vivió de lleno todo el idealismo emblemático de mayo del 68 y la democracia prosperó a grandes pasos, con las artes aportando una contribución sustancial a la causa.
Woodstock alemán
El evento internacional Essener Songtage, producido y organizado en 1968 por el periodista Rolf- Ulrich Kaiser, de la ciudad de Essen, fue fundamental para que los grupos de rock alemanes ganaran autoconfianza y pasaran a ser reconocidos a escala continental. El afortunado festival, que posteriormente fue considerado como Woodstock alemán, abrió espacio por primera vez para que bandas alemanas tocaran ante grandes públicos (cerca de 40.000 espectadores).
Guru-Guru (de Heidelberg), Tangerine Dream (Berlín), Xhol Caravan (Wiesbaden) y Amon Düül subieron al palco, al lado de estrellas internacionales como Frank Zappa y su grupo The Mothers of Invention, The Fugs, Family y Julie Driscoll.
En su libro Das Buch der Neuen Pop Musik (El Libro de la Nueva Música Pop), publicado en 1969 por la Econ Verlag, de Düsseldorf (la misma ciudad de donde surgió Kraftwerk), Rolf-Ulrich afirma que el evento “fue la primera gran documentación presentada en Europa sobre los diferentes géneros musicales de actualidad y de la cultura underground”. La prensa de la época lo entendió de otra manera, como la revista Der Spiegel, que disparó su crítica contra la supuesta “feria delirante de la pornografía”, tal como destaca Rofl-Ulrich en su libro.
Desde el otro lado del Atlántico
El norteamericano Zappa, uno de los dos padres del rock experimental, ya declaraba entonces su interés por la entrada emergente de la música electrónica, que más tarde desembocaría en la música de Kraftwerk y en la Love Parade de Berlín.
No obstante, el músico también tenía sus críticas: “Es necesario saber producir música electrónica y saber entender su tecnología, pero desgraciadamente son pocos los estudios dedicados a ella, y aún menos los de buena calidad”, afirmó el líder de la banda vanguardista The Mothers of Invention al periodista y productor alemán.
En 1971, el propio Rolf-Ulrich Kaiser fundó los sellos fonográficos Ohr Musikproduktion y Pilz, que desempeñarían un papel importante en la divulgación del Krautrock. “Mientras que Ohrmusikproduktion se especializó en música de la esfera psicodélica, experimental y electrónica, Pilz se centró en el folkrock. En apenas tres años, se lanzaron entre ambos cerca de 50 LPs”, afirmó Uwe Husslein en su artículo publicado en el libro Summer of Love – Psychedelische Kunste der 60er Jahre (Verano del amor – arte psicodélico de los años 60), de la editora alemana Katje Cantz.
Autor: Felipe Tadeu
Editor: Claudia Herrera Pahl