Orden de detención contra Gadafi
16 de mayo de 2011“Las pruebas demuestran que Muamar al Gadafi ordenó personalmente ataques contra civiles desarmados en Libia. Se trata de crímenes contra la humanidad”, advirtió el fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI) ante periodistas en La Haya.
Moreno Ocampo considera al líder libio Muamar Gadafi, al hijo de éste así como al jefe de inteligencia como los principales responsables de los crímenes cometidos por el régimen de Trípoli durante la sangrienta represión de las protestas comenzadas en febrero pasado. El fiscal los acusa de crímenes como asesinato, violación y persecución de civiles inocentes.
Intento por mantenerse en el poder
“Gadafi cometió esos crímenes para asegurar su permanencia en el poder”, explicó el fiscal de nacionalidad argentina. La acusación, de más de 70 páginas recabada por los expertos de la fiscalía de la CPI, queda ahora en manos de tres jueces de la CPI para su análisis. Su dictamen será decisivo para saber si, finalmente se emiten las órdenes internacionales de detención y se elabora un acta de acusación formal.
Entre los crímenes de los que se acusa a Gadafi figura la muerte de entre 500 y 700 manifestantes civiles. La acusación denuncia que el régimen del líder libio empleó armas prohibidas por las convenciones internacionales, entre ellas bombas de racimo.
“Las fuerzas de Gadafi atacaron a civiles en sus hogares y dispararon con fuego contra los manifestantes en espacios públicos. Los francotiradores leales al régimen recibieron la orden de disparar a los manfiestantes en el momento en que salían de las mezquitas”, destacó Moreno Ocampo. El fiscal explicó que las fuerzas de Gadafi elaboraron listas con los nombres de supuestos disidentes que fueron detenidos, encarcelados en Trípoli, torturados y desaparecidos.
Reclutamiento de mercenarios europeos
Saif al Islam Gadafi, de 38 años, hijo mayor del líder libio, es considerado como el que reclutó personalmente a mercenarios, algunos de ellos europeos, para ejecutar su tarea represora.
A pesar de que Saif al Islam era considerado hasta hace poco la cara más amable y pro occidental del régimen libio, debido a sus esfuerzos a favor de la apertura económica de su país, en los últimos tiempos radicalizó sus posturas y se convirtió en uno de los elementos de la guardia pretoriana de su padre. Se estima que unos 120.000 matones a sueldo integran esa terrorífica escolta con la que Gadafi se propuso masacrar a la población civil y sofocar las protestas de quienes quieren derrocarlo.
“Su hijo mayor, Saif al Islam, es el primer ministro de facto y Abdulá al Senoussi es su mano derecha, el ejecutor”, explicó Moreno Ocampo.
El dictamen de los tres jueces de la corte será decisivo para saber si se emitirán las órdenes internacionales de detención y si se elabora una acta de acusación formal. Libia, entre otros países del mundo, como Estados Unidos o Israel, no reconoce la jurisdicción de la CPI.
Autora: EU/Dpa/Reuters
Editor: Pablo Kummetz