Llega a los cines Jud Süss, que revive el fantasma de Goebbels
24 de septiembre de 2010Basada en la cinta homónima estrenada en 1940 en el Festival de Venecia, el trabajo de Roehler intenta destacar como el mundo del espectáculo se dejó instrumentalizar por la maquinaria nazi. Sin embargo, desde su estreno en el Festival de Cine de Berlín en febrero pasado, fue recibida con rechiflas y abucheos.
El argumento, que inspiró a varias novelas e interesó vivamente al ministro de propaganda de Hitler, Joseph Goebbels, se basa en la historia de Joseph Süss Openheimer, un judío asesor del duque de Wüttenberg en el siglo XVIII que llegó a convertirse en uno de los hombres más influyentes de la época, pero fue asesinado cuando su protector murió.
Estrellas en el reparto
La película, cuajada de rostros célebres del cine alemán, narra como Goebbels (Moritz Bleibtreu) reconoció el potencial propagandístico de la historia y ofreció al actor austríaco Ferdinand Marian (Tobías Moretti) el papel de su vida. Marian, un actor de medio pelo, deberá interpretar el papel de Jud Süss, un judío tramposo y corrupto. Pese a las reticencias de su mujer de origen judío, (Martina Gedeck), el actor teme contradecir a Goebbels.
Roehler hace una intepretación del conflicto de un actor en plena dictadura nazi, aunque se permite grandes libertades, como sus explícitas escenas de sexo. El director defiende sin embargo su estilo: “Quería mostrar la morbidez y la decadencia, por ello recurrí a estas controvertidas escenas de sexo con Gudrun Landgrebe en medio de un Berlín en llamas. Ese es mi sello personal, que hace parecer algo estridente a un tema sumamente serio”, dice el realizador.
Roehler y su guionista sostienen que se puede ser responsable con el manejo de la época sin renunciar a hacer cine de ficción. Esas libertades artísticas e históricas son asumidas por otras cintas que abordan el nazismo y el Tercer Reich, como Inglorious Bastards, de Quentin Tarantino. Pero destaca que su cinta nada tiene que ver con el trabajo de éste.
Retrata a una época
Al realizador no le gustó la esposa del personaje central en el argumento original, una alemana que se queja de todo, y la transformó en una esposa de origen judío que podría ser deportada a Auschwitz en cualquier momento por Goebbels. Con ello alude a la tensión existente debido a que muchos artistas célebres de la época estaban casados con mujeres de origen judío.
Roehler se aproxima al guión original con respeto, lo que tal vez le impide arriesgarse. Pero sólo quien se arriesga a poner en escena lo macabro puede reflejar el espanto.
Autor: Jörg Taszman/ Eva Usi
Editora: Emilia Rojas