Los cruceros Global Dream: miles de toneladas de chatarra nueva
Los cruceros Global Dream I y II deberían ser los más grandes del mundo. Pero tras la quiebra del fabricante alemán MV Werften debido a la pandemia, ambos podrían ser abandonados antes de ser terminados.
Centros turísticos de lujo en el océano
Este es el aspecto que deberían tener algún día los dos buques gemelos de lujo Global Dream I y II de la "Global class", una clase de cruceros construidos por el fabricante alemán MV Werften. A bordo tiene todo lo que corresponde a un complejo vacacional bien equipado: restaurantes, un centro comercial, cines, un parque temático y un parque acuático, entre otras numerosas atracciones.
Los más grandes de su clase
Solo el casco interior del Global Dream I tiene 216 metros de longitud. De hecho, cada uno de los dos barcos iba a llevar 208.000 toneladas de peso bruto al agua, distribuidas en una longitud de 324 metros y una anchura de 46 metros, con espacio para 9.500 pasajeros más la tripulación en 20 cubiertas. Esto los habría convertido en los mayores cruceros del mundo.
Todo se derrumbó
La pandemia de coronavirus destruyó los planes de negocio de muchas compañías de cruceros, incluida Dream Cruises, la filial del grupo malasio Genting que también es propietaria de MV Werften. Los barcos estaban orientados principalmente al mercado chino, donde la demanda se ha desplomado masivamente.
Casi listo
Solo hay esperanza para el Global Dream I: "El barco que está completado en tres cuartas partes y a flote, puede utilizarse en todo el mundo", dijo el portavoz de prensa Christoph Morgen, a DW. El objetivo sigue siendo "que el Global Dream I navegue como un crucero". El Global II, en cambio, no es aún flotante y tendrá que ser desmontado en tierra.
Decenas de miles de toneladas de chatarra
Algunas partes utilizables probablemente podrían venderse como tales. ¿Quizá las hélices de casi 6 metros de diámetro o los seis motores de 19.000 kilovatios? Según personas del sector, un enorme cargamento de chalecos salvavidas ya tiene nuevo dueño. Sin embargo, es probable que la mayor parte del Global Dream II sea chatarra. Pero el acero podría ser comercializado pese a sus elevados precios.
Un montón de chatarra flotante
El hecho de que el Global Dream I aún no tenga comprador se debe también a que fue diseñado acorde a preferencias de los pasajeros de China, donde cuatro personas por camarote no es inusual. El buque debe abandonar el astillero de Warnemünde (en el norte de Alemania) a más tardar a finales de 2023, cuando el nuevo propietario, ThyssenKrupp Marine Systems, tiene previsto construir buques de guerra.
¿Última parada el Océano Índico?
Cada año, cientos de transatlánticos son abandonados en Asia (aquí: Gujarat, India) y ocupados bajo condiciones de trabajo precarias. Los buques con matrícula de la UE se rigen bajo normas más estrictas, y el único astillero autorizado que puede reciclar barcos de más de 300 metros está en Turquía. Pero el Global Dream I aún no tiene matrícula, y los expertos se preguntan: ¿Cuenta ya como barco?